
Si ayer la noticia eran las elevadas caídas registradas por las bolsas asiáticas a lo largo de la sesión, hoy han cambiado el rumbo y se han decantado, decididamente, por las alzas. Animados por la nueva iniciativa del gobierno estadounidense para combatir la infección subprime y liberar a los bancos de sus activos contaminados, el Nikkei de Japón y el Hang Seng de Hong Kong han subido con fuerza.
El índice Nikkei de la Bolsa de Valores de Japón ha cerrado con una subida del 3,76%, hasta los 11.920,86 puntos, después de que, por cuarto día consecutivo, el Banco de Japón haya anunciado una nueva inyección de liquidez.
En concreto, la institución financiera nipona inyectará 2 billones de yenes (13.300 millones de euros) suplementarios en el mercado bancario para aliviar la falta de liquidez debida a la crisis financiera.
Por su parte, el Hang Seng de la Bolsa de Hong Kong cerró con un alza del 9,6% a 19.327,73 puntos, después de haber llegado a acaer ayer hasta un 7% intradiario.
"Los inversores son prudentemente optimistas", indicó Zhang Yidong, analista de Industrial Securities en Shanghai, donde los nversores impulsaron una gran subida del 9,46%, insuflada por la decisión de los reguladores chinos de eliminar el impuesto sobre la compra de acciones.
Además, para frenar la caída en el sector bancario, la compañía de inversiones estatal Huijin, que depende del banco central chino y tiene participaciones en distintos bancos nacionales, comprará acciones del Banco Industrial y Comercial de China (ICBC), el Banco de China y el Banco de la Construcción de China, los tres mayores del país.