
Cinco meses después de que Morningstar pusiera en marcha el proyecto de categorización de sicavs, tan sólo hay dos vehículos conocidos con un rating de cinco estrellas, la máxima nota. Son Soandres de Activos, la sicav de Sandra Ortega, hija de Amancio Ortega, y Kalyani, que pertenece a las cuatro familias que están detrás de Casa Kishoo, el family office del afamado inversor indio Ram Bhavnani.
Tener un distintivo de cinco estrellas es un privilegio con el que muy pocos cuentan. En concreto, solo 10 de las 120 sicavs españolas calificadas tienen esta nota, que valora la mejor ecuación rentabilidad riesgo de estos productos. Para más inri, solo dos de ellas son famosas, que suelen servir como ejemplo para muchos otros ahorradores a la hora de gestionar su patrimonio; el resto son de inversores anónimos.
Los requisitos mínimos para tener una calificación por parte de la firma de análisis son contar con un historial mínimo de tres años y pertenecer a una categoría para la cual Morningstar otorgue estrellas, que son las mismas que se utilizan para los fondos de inversión.
Las sicavs de Ortega y Bhavnani, además, se comportan mejor que la media de estos vehículos en lo que va de año, en el que Soandres de Activos, gestionada por JPMorgan, pierde un 1,41% y Kalyani, por Amundi, un 0,85%, por debajo del 3% de la media -ver gráfico-. Un buen hacer del equipo que se extiende también al medio plazo, ya que ambas duplican la rentabilidad media del resto a cinco años: la primera gana un 4,5% e invierte todo su patrimonio en fondos de inversión.
La segunda, por su parte, repunta un 5,75% al volcar sus principales posiciones en renta fija, ya sea a través de fondos o de obligaciones, aunque las españolas ArcelorMittal y Telefónica se cuelan en el top ten de su cartera. En comparación, el resto sube, de media, un 2,6% en el mismo periodo.
Otras sociedades
Otras seis sociedades de inversión de capital variable tienen un rating Morningstar, aunque más bajo. Torrenova Inversiones, gestionada por Juan Berberana y en la que la familia March tiene parte de su patrimonio personal, tiene cuatro estrellas. Las mismas que Chart Inversiones, vinculada a la familia del Pino (Ferrovial), y Lierde, en la que César Alierta, presidente de Telefónica, invierte parte de su dinero.
De todas, esta última es la más rentable, ya que acumula una rentabilidad del 7,5% anualizada a tres años, el triple que el mercado.
Un comporamiento similar al que tiene Arbarin, la sicav del empresario Juan Abelló, ya que sube también un 7,5%; no obstante, tiene tres estrellas Morningstar. Catoc, de Francisco José Arregui, director general de seguros de Catalana Occidente; y La Muza Inversiones, que canaliza parte de la fortuna de la célebre familia de ban- queros que fundó a finales del siglo XIX el Banco Urquijo, también tienen este rating.
Algunas conocidas sociedades, como las de Koplowitz, Hernández Calleja y la familia Entrecanales no cuentan con calificación.