Eventos como el Mobile World Congress (congreso mundial de móviles) que se celebra estos días en Barcelona trazan las líneas maestras del futuro que preparan los sectores tecnológicos. El coche datáfono propuesto por Visa y Nissan traspasó el lunes el contexto del salón y se dejó notar en bolsa, donde las acciones de la compañía de pagos con tarjeta repuntaron más de un 2%.
Visa presentó en Barcelona un sistema para convertir los coches en plataformas de pago que permitan abonar el combustible en una estación de servicio o el coste de los aparcamientos sin la necesidad de bajar del vehículo. Una propuesta con la que la compañía desafía la competencia planteada por herramientas como Apple Pay o Samsung Pay, que están desarrollando servicios similares a través de los smartphones. El sistema se pondrá a prueba este año en California, según informó la firma de pagos.
El efecto del coche datáfono no solo se pudo sentir en el parqué durante la sesión del lunes, sino que firmas de inversión como Bernstein o RBC Capital Markets aprovecharon la ocasión para reiterar la recomendación de compra para las acciones de la compañía. En total, un 81% de los analistas que siguen su cotización aconsejan adquirirlos y ni uno solo venderlos.
Precisamente, la capacidad de Visa para adaptarse a las nuevas tecnologías es clave para el bienestar de su negocio. "Visa y Visa Europe concentraban el 42% del volumen de pagos con tarjeta en 2014 frente al 32% de China UnionPay -líder en el gigante asiático- y el 19% de MasterCard", explica el equipo de análisis de Bloomberg, que considera que son volúmenes que estas compañías serán capaces de mantener en el futuro gracias a la adaptación de sus servicios a los pagos online, "consiguiendo que hasta herramientas como PayPal dependan de ellos".
De hecho, el consenso de mercado confía en que Visa hará crecer sus ganancias más de un 20% en 2016 respecto a 2014. "La fortaleza del dólar es el principal lastre para la compañía mientras que la tecnología móvil abre nuevas oportunidades", continúan los expertos de Bloomberg.
Recientemente, Visa dio otro paso clave adquiriendo Visa Europe para unificar sus operaciones. Los dos negocios del emisor de tarjetas de crédito llevaban nueve años funcionando por separado. "La integración de Visa Europe incrementará los ingresos de la compañía porque reducirá los costes y elevará las tasas de procesamiento", señalan desde el servicio de análisis de la agencia de información económica. "El reciente acuerdo con Wal-Mart puede ser señal de un deshielo entre Visa y los grandes minoristas en torno a este tipo de tarifas", concluyen.
Un 3% de rentabilidad
Desde octubre, Ecotrader tiene abierta una estrategia sobre Visa que logra un 3% de rentabilidad. Y es que, pese a que es una compañía indirectamente ligada al ciclo económico en cuanto que depende de la evolución del consumo, sus acciones cotizan a un 10% de los máximos históricos marcados en noviembre de 2015, después de encajar la presión bajista que ha sacudido las bolsas de todo el mundo.
Sus acciones no muestran deterioro
Los títulos de Visa, por técnico, no presentarían deterioro en sus posibilidades alcistas mientras no pierdan el nivel de los 66 dólares. En el corto plazo, "parece que las caídas pueden encontrar soporte en los 69/70 dólares", apunta Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader. Según el experto, "este nivel puede ser una oportunidad de compra que lleve al título a la zona donde comenzó el ejercicio", por encima de los 77 dólares.