Inversores y analistas aprueban, un día después, los resultados de Inditex

Más vale tarde que nunca. Eso podría pensar Amancio Ortega, presidente y máximo accionista de Inditex, tras contemplar la reacción del mercado a la presentación de sus cuentas semestrales.

La cadena de ropa anunció sus resultados de los primeros seis meses del año el pasado miércoles y, si bien a priori fueron interpretados negativamente por los inversores, ayer tuvieron su recompensa tras la subida de precio objetivo de ING, Merrill Lynch, Goldman Sachs y Morgan Stanley.

Las cuentas de Inditex partían con una cierta estela de pesimismo, tras el último informe de Caja Madrid en el que los analistas de la caja aseguraban que "pensamos que es un buen momento para tomar beneficios puesto que publica resultados y acumula una subida superior al 50 por ciento en los últimos doce meses". Este consejo y, sobre todo, que se han estrechado los márgenes debido al efecto divisa y el crecimiento de los costes, hicieron que los títulos de la compañía de Amancio Ortega cayeran durante la jornada del miércoles un 1,7 por ciento, para más inri en la mejor sesión del Ibex 35 desde finales de julio.

Pero ayer se invirtieron las tornas. Inditex fue una de las mejores del parqué, ganando un 2,03 por ciento, hasta 34,76 euros, después de la subida de precio objetivo de Merrill Lynch, de 35 a 37 euros; Morgan Stanley, en la misma línea; Goldman Sachs, de 37,50 a 38,30; e ING, el más optimista de los cuatro, de 40 a 41 euros. Goldman Sachs justificaba su decisión en que "el estrechamiento de márgenes estaba descontado y los resultados estuvieron ligeramente por encima de las previsiones". Sin embargo, según el precio ideal establecido por el consenso de analistas, la compañía textil parece estar llegando a su techo bursátil, los 36,65 euros. Está a un 5,4 por ciento.