
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, enfrenta con ganas su último año en la Casa Blanca. Entre sus prioridades se encuentra endurecer el control en la compra de armas a este lado del Atlántico tras las masacres registradas en 2015. Un hecho que el demócrata impone por decreto y que no ha sentado bien entre buena parte de los legisladores republicanos, que recordemos defienden la tenencia personal de armas como un derecho constitucional. Obama llora al defender de "urgencia" el control de armas en EEUU.
"Este es uno de los debates políticos más polarizado", aseguraba el presidente de EEUU quien criticó las "continuas excusas para no tomar ningún tipo de medida". "Tenemos que prevenir la próxima tragedia", matizó. Obama criticó implicitamente a los republicanos al asegurar que "el lobby de los fabricantes y distribuidores de armas puede haber secuestrado al Congreso, pero no a América", aclaró.
Las medidas, que obligarán a los vendedores de pistolas y rifles a contar con un mayor número de licencias e incrementará la supervisión y los chequeos para aquellos que compren armas de fuego, no han hecho mella en la cotización de los fabricantes de este tipo de productos.
De hecho, Smith & Wesson se dispara en bolsa más de un 8,7% después de cerrar la tumultuosa sesión del lunes con un incremento del 6%. En los últimos 12 meses, las acciones de la compañía se han revalorizado un 176%. Lo mismo ocurre con Sturm, Ruger & Company cuyos títulos suben más de un 7% pese al decreto impuesto por el mandatario demócrata. En el último año sus acciones acumulan subidas del 88% pese a los tiroteos registrados el año pasado en Charleston, Oregon y San Bernardino.
Coincidiendo con el esperado discurso de Obama, el primer tras su parón navideño, Smith & Wesson incrementó el lunes sus proyecciones de beneficio hasta finales de su año fiscal, que culminará en abril. La compañía indicó que las ventas de sus productos ha sido mucho mayor a la esperada, "lo que ha reducido los inventarios de los distribuidores", según un comunicado publicado por el fabricante de armas.
Según BB&T Capital Markets, los chequeos para la compra de armas aumentaron un 38% durante los últimos doce meses, un hecho que ha provocado que su analista, Brian Ruttenbur, aumentase la recomendación de Smith & Wesson a comprar desde vender. Desde Wunderlich Securities, su analista Rommel Dionisio, aseguró en declaraciones recogidas por MarketWatch que a medida que se atisban cambios regulatorios para la tenencia legal de armas "las ventas suelen acelerarse".
La revista Fortune indicó a finales de diciembre que durante 2015, sin incluir el mes de diciembre, se realizaron más de 19,7 millones de verificaciones de antecedentes, lo que supone el mayor nivel jamás registrado y lo que hace estimar que 2015 pudo ser un año récord en la venta de armas.