Si el baile de operaciones corporativas se ha acrecentado en los últimos tiempos, un mundo tan atomizado como el de las gestoras de fondos no ha querido quedarse en el banquillo. Ayer la entidad belga Bank Degroof anunciaba los términos finales de su fusión con la gestora independiente Petercam, por el que la primera representará un 70 por ciento de la nueva compañía y Petercam un 30 por ciento. Juntas gestionarán en torno a 50.000 millones de euros, pero es solo uno más de los grandes tratos anunciados en este año entre gestoras.
Hace apenas dos meses, Pioneer y Santander AM confirmaban que a partir de ahora serán pareja de baile, para crear un gigante que gestione 353.000 millones de euros a nivel global. Se trata de un movimiento que ha permitido a la española saltar del puesto 47 a la segunda posición por volumen de activos en Europa y al undécimo a nivel mundial, por detrás de Invesco.
Antes de eso, la americana Ameriprise fusionaba dos de sus filiales, Threadneedle Investments y Columbia Management para crear un estandarte de la gestión con activos por valor de más de 400.000 millones de euros. De conquistar nuevas fronteras va la estrategia que ha llevado a cabo este año el grupo francés Oddo&Cie. En abril quiso sacar a la pista a su gestora, Oddo AM para que pidiese la mano del grupo alemán Meriten Investment Management y crear un grupo franco-alemán que gestione en conjunto 40.000 millones de euros. También la suiza Vontobel concluyó a finales de abril la compra de un 60 por ciento de la firma londinense Twentyfour, especializada en renta fija y podría no quedarse ahí, ya que reconoció en su momento que "sigue estando en situación de considerar nuevas oportunidades de crecimiento externo", es decir, continúa abierta a más compras. Un estado en el que parece estar casi todo el sector, y es que, según datos replicados por Bloomberg, este sigue muy segregado.
Según estos datos, mientras que en EEUU la industria de los fondos está más concentrada (entre los cinco principales competidores controlan un 40% del mercado), de manera global, ese 40% se reparte nada menos que entre las 20 mayores gestoras. Así, aunque en los últimos años la industria ha vivido un proceso de concentración (las 20 grandes gestoras mundiales han pasado del 31 por ciento de cuota de mercado de 1997 al 41 por ciento actual), aún queda mucho camino por recorrer, sobre todo en Europa respecto a la fotografía del mercado en EEUU.
Que los movimientos entre gestoras iban a llegar era de esperar. Primero, por sus buenas recomendaciones. Casi ninguna gestora cotizada es venta. Y segundo, porque la mayoría tiene caja. A eso hay que unir que, ahora, las gestoras tendrán que abaratar costes si quieren seguir ofreciendo fondos de renta fija rentables, lo que reducirá sus márgenes. ¿La forma de paliar este problema? Ganar volumen.
El sector, en máximos de 2007 en bolsa
El anuncio por parte del BCE de su programa de estímulos monetarios tuvo un primer impacto claro en el sector de las gestoras de fondos que, en particular en España, viven un momento dulce a base de récords de patrimonio. El sector en Europa (en el que también se incluyen las gestoras de las bolsas, como BME) está en zona de máximos de 2007. Y solo en 2015, algunos de sus componentes, como Henderson, Schroders o Jupiter Fund Management suben más de un 20 por ciento.