Defienden la postura de los accionistas cuya participación no es lo suficientemente elevada como para tener voz y voto en las compañías del mercado español. Han sido la cabeza visible del inversor minoritario en casos como el acontecido en torno a Banco Popular y, desde ayer, la Asociación de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec) tiene una nueva presidenta, Isabel Estapé.
"Iniciamos un periodo de crisis o recesión, al contrario de lo que dicen otros, en el que Aemec tendrá un papel importante", sentenció Estapé.
A la espera de grandes movimientos
La presidenta de la asociación augura una etapa de relevante actividad del organismo ya que defiende que históricamente "los periodos de crisis llevan a fusiones, por lo que se avecinan un par de años en los que se pueden ver movimientos corporativos importantes en las empresas."
Desde la asociación se pidió a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que actuase en consecuencia en el caso de la venta del paquete de acciones de Banco Popular que tenía en posesión el inversor Trinitario Casanova, un proceso oscuro que ha destapado numerosas especulaciones sobre la intención de calentar la acción, aunque Estapé reconoce que el regulador "tenía poco margen de actuación en este caso".
Sin embargo, perciben que la imagen del regulador "ha sido en ocasiones la de un controlador, más que de defensa del accionista". De hecho, la presidenta de la asociación cree que el regulador del mercado español "no ha sabido ganarse el respeto de los minoritarios".
