Desde China llegaron datos poco halagüeños. La actividad industrial del país cayó a mínimos de tres meses. El dato adelantado de PMI que ofrece HSBC se situó en 50,3, frente al 51,7 anterior. Unido a esto, la posibilidad de una subida de tipos anticipada -como dejaron entrever el miércoles las actas la Fed- hicieron mella en el oro.
Por quinta sesión consecutiva los inversores decidieron deshacerse del metal dorado, lo que le llevó no solo a marcar su precio más bajo del mes de agosto sino a mínimos de junio, los 1.273 dólares por onza -tras ceder un 1,5%-. Y es que ayer no fue un buen día para los metales preciosos. La plata y el platino también registraron descensos del 0,42 y del 0,62 por ciento, respectivamente.
La mala jornada de las materias primas relegó al sector de las mineras al peor del día. Las más afectadas fueron Fresnillo, Lonmin y Randgold que perdieron un 3,55%, un 2,11% y un 1,86%, en cada caso.
Al margen de los metales, el oro negro, también marcó mínimos. El West Texas cedió un 1,9%, hasta los 94,24 dólares por barril, su nivel más bajo desde enero.