Susto esta mañana en el corazón del distrito financiero de la capital británica, que ha sido cerrado tras decretarse la alarma por un coche abandonado en las inmediaciones del Banco de Inglaterra. La policía ya ha analizado el coche y asegurado que no hay peligro.
Todo ocurría poco después de las 11 de la mañana, hora británica. Un hombre paraba su coche en una intersección de calles justo en el Banco de Inglaterra y salía corriendo. Inmediatamente, la Policía acordonó la zona y todas las calles de los alrededores de la institución monetaria eran cortadas ante los temores a un ataque terrorista, según publica la prensa británica.
Poco más de una hora después, sobre las 12:30 horas, las fuerzas del orden declaraban el coche "seguro" y anunciaba la reapertura de la zona a los peatones.
Además del banco central inglés, en la zona se encuentran las sedes que tienen en Londres muchas de las grandes instituciones financieras mundiales. De hecho, para evitar males mayores, el Banco de Inglaterra emitió un comunicado asegurando que todas las operaciones financieras esenciales no han sido afectadas por la alerta.
Los empleados han continuado trabajando con normalidad, aunque en algunos edificios se ha pedido que se alejarán de las ventanas como medida de precaución.
Todavía no se ha aclarado cuáles han sido los motivos del conductor, que tampoco ha sido detenido.
