El buen tono que se vio ayer en el mercado, que llevó a Europa a subir tras varias jornadas de descensos, debe mantenerse hoy al cierre semanal, ya que mañana las bolsas permanecen cerradas por festivo. Las alzas de ayer dan alas a los alcistas, pero es necesario batir resistencias para que el rebote sea creíble.
De momento, parece que no hay razón para ser alarmistas, ya que el rebote de ayer permitió a los índices europeos acercarse a resistencias y la ruptura de las mismas es el primer paso para que creer en que el rebote puede no ser vulnerable. Además, tienen que cerrarse los huecos bajistas que se abrieron el pasado viernes y que "en el Eurostoxx 50 serían los 3.150 y en el IBEX 35 los 10.335 puntos", indican los analistas de Ecotrader.
Mientras, en Wall Street se anotaron su tercer día de subidas, animados por los resultados empresariales y las palabras de Janet Yellen, presidenta de la Fed, que reconoce que "a medida que se reafirme la recuperación, es obvio que tendremos que ajustar la política monetaria para evitar rebasar nuestros objetivos".
Así las cosas, la sesión de hoy es clave. Al fin y al cabo es la referencia que van a tener los mercados cuando reabran el lunes en Wall Street o el martes, en el caso de las bolsas europeas. Un cierre por encima de resistencias daría alas a los alcistas pero unos números rojos alimentarían el hambre bajista.
Además, conoceremos los resultados de dos de los grandes bancos americanos: Goldman Sach y Morgan Stanley en una sesión carente de datos macroeconómicos de relevancia.