El dólar australiano ha tocado hoy el nivel de los 0,915 dólares americanos, su nivel más alto en lo que va de año. El euro, por su parte, ganó este lunes más de un 1% frente al billete verde y se negociaba alrededor de los 1,3829 dólares. La capacidad de recuperación tanto del euro como del dólar australiano ha dejado perplejos a los analistas, y alguno incluso piensa que el mercado de divisas vive en un mundo alternativo.
Tanto uno como otro han demostrado su resistencia frente a los malos datos de actividad manufacturera en China y frente a las preocupaciones sobre la salud de la economía asiática. Especialmente el dólar australiano que, recuerdan los analistas consultados por Reuters, se utiliza a menudo como un indicador del riesgo chino. No en vano, China es el mayor socio comercial de Australia.
"Vivimos en uno de esos mundos alternativos aquí en la tierra de divisas", declara a la CNBC Robert Rennie, jefe global de estrategia cambiaria del banco Westpac.
Este analista considera "extraño" el repunte del dólar australiano frente al dólar, dada la debilidad de los datos de fabricación que muestra la economía china. La única explicación que le encuentra es que posiblemente los inversores empiezan a ver las cifras de China y su relación con la divisa de forma diferente, señala la CNBC.
"En el mundo en que vivimos hoy, las malas noticias procedentes de China pueden ser realmente buenas para el dólar australiano, ya que sugieren la posibilidad de un corte triple-R o un mayor aumento de los estímulos fiscales", señala Rennie, en referencia a un posible recorte en nivel de reservas obligatorias (la cantidad en efectivo que los bancos locales deben mantener en reserva).
Por otro lado, el precio del cobre y el mineral de hierro, ambas principales exportaciones de Australia, se ha derrumbado en las últimas semanas, aumentando la confusión de los analistas sobre por qué el dólar australiano sigue tan fuerte.
El jefe global de FX Research en el banco Standard Chartered, Callum Henderson, no cree que la resistencia del dólar australiano dure mucho más, dada la debilidad de los precios de las materias primas y un cuadro mixto relativo a la economía nacional. En su opinión, pronto habrá nuevos comentarios del banco central que pondrán freno a esta fortaleza.
De hecho, en el pasado, el gobernador de la entidad Glen Stevens apuntó que prefería que la divisa australiana se situase en los 85 centavos de dólar, lo que contribuyó a su caída.