Poco le ha durado la alegría a Rexel este año. Y es que la compañía gala, distribuidora de artículos de electricidad, ha perdido el apoyo que le brindaba el consenso de mercado en forma de consejo de compra. Ahora sus títulos tienen que conformarse con un mantener.
De hecho, los números que está ofreciendo la compañía en 2014 no son para 'tirar cohetes'. Por un lado, desde enero sus acciones caen en bolsa más de un 6% y, por otro, sus resultados correspondientes a 2013 no convencieron. A este respecto, a mediados de febrero la firma publicó un BPA (beneficio por acción) de 1,18 euros, un 0,8% inferior a lo estimado por el consenso de mercado, y un 10,6% por debajo de lo registrado en 2012.