
Se pueden encontrar rentabilidades superiores al 3% entre las compañías de Wall Street que jamás han recortado la retribución en los últimos 20 años. Además, si se tiene en cuenta la recompra de acciones, la bolsa estadounidense ofrece más rendimiento que la europea. Puede aprovechar esta genuina forma de remuneración a través de ETFs.
"Debía de estar en el baño cuando se tomó la decisión". Warren Buffett es tan poco partidario de pagar dividendos que así se ha referido en alguna ocasión al hecho de que una vez su holding de inversión, Berkshire Hattaway, remunerase al accionista. Pero que haya decidido no pagar dividendos al accionista, no quiere decir que le falte olfato para detectar pagos rentables. Es uno de los accionistas de referencia de Coca-Cola, una de las compañías que forman parte de la aristocracia del dividendo norteamericano, por la tradición de haberlo mantenido intacto o incluso elevado constantemente en los últimos 25 años.
Junto a otras 53 compañías forma parte del índice S&P Dividend Aristocratics, que reúne a las compañías del S&P 500 que cumplen con esa premisa. Entre todos sus componentes hay sólo 13 que son una recomendación de compra para el consenso de mercado en este momento. Además de ser uno de ellos, Coca-Cola se cuela entre las mayores rentabilidades: se espera que el próximo año pague 1,19 dólares, con una remuneración superior al 3%, un rendimiento que ya compite con un 48% de los valores del Stoxx 600 europeo y que hará que Buffett se embolse nada menos que 475 millones de dólares con los cuatro pagos trimestrales de 2014.
Rentabilidades con consejo de compra
Para los analistas existen otros valores que se merecen la recomendación de compra entre las compañías americanas que año tras año han ido elevando el dividendo. Rentabilidades de más del 3% se pueden encontrar en la petrolera Chevron o en AbbVie, la división de investigación de la farmacéutica Abbott. Más del 2% lo ofrecen, a precios actuales, la acerera Nucor, la cadena de farmacias WalGreen, la dueña de la agencia de calificación Standard&Poor's, McGraw Hill, y el proveedor de productos sanitarios, Cardinal Health.
Claro que, si el inversor prefiere diversificar el tiro, puede hacerlo a través de ETFs (fondos cotizados). Hasta ahora no era posible invertir en la aristocracia de la retribución del índice S&P 500, pero sí de un universo más amplio. A través del SPDR S&P US Dividend Aristocrats ETF EUR, se gana exposición a las 83 compañías más selectas en retribución del S&P Composite 1500, es decir, a aquellas que no han dado sustos en retribución en los últimos 20 años (el producto gana un 17% en el año). Pero el pasado jueves nació el primer ETF que invierte en la nobleza del dividendo de las 500 mayores compañías de Wall Street. Es de Proshares y se encuentra bajo el nombre de ProShares S&P 500 Aristocrats (NOBL).
Puede que la renta variable norteamericana no pueda competir todavía con la rentabilidad de la retribución europea pero los elevados niveles de caja de las empresas estadounidenses están provocando que se lancen a la recompra de acciones, con lo que también elevan el rendimiento que ofrecen al inversor. De hecho, el año pasado, las 500 compañías más representativas de Wall Street ofrecieron una rentabilidad total del 5,3% frente al 4,2% que rentaron las europeas, teniendo en cuenta dividendos y recompra de títulos.
También en este caso existe la opción de no tener que decantarse por el programa de una sola compañía -hay varios en marcha, como el de Apple al que la compañía añadió otros 50.000 millones en el mes de abril, los 18.000 millones en acciones que Phillip Morris adquirirá en los próximos tres años, o los 300 millones de títulos que AT&T anunció en marzo (a precios de mercado supone algo más de 10.400 millones de dólares).
Con el ETF PowerShares BuyBack Achiever (PKW), el inversor puede ganar exposición a compañías que hayan recomprado al menos un 5% de su capital en los últimos 12 meses. Sus mayores posiciones están en ConocoPhillips, Oracle, Amgen, AIG y Time Warner. Y la estrategia es más que rentable, porque el 31% que gana en el año, bate la rentabilidad de los tres principales índices americanos (el Dow Jones, el S&P 500 y el Nasdaq).
