
Ya ha empezado la cuenta atrás para completar el programa de financiación que se marcó el Tesoro Público para este año. El organismo encargado de emitir la deuda del Estado español ha reunido el 90,1% del objetivo de financiación a medio y largo plazo de 2013, por lo que en la subasta de bonos del jueves solo pretende obtener entre 1.500 y 2.500 millones de euros.
El Tesoro volcará más esfuerzo este martes con una emisión de letras a 6 y 12 meses para captar entre 3.500 millones y 4.500 millones. En total, la misión que tiene por delante esta semana es recaudar hasta 7.000 millones para las arcas públicas. En septiembre, en la última colocación de deuda a un año, el Tesoro pagó una rentabilidad media del 1,367%, con lo que sufrió un ligero repunte frente al mes anterior. Esta vez, los costes podrían bajar teniendo en cuenta que en el mercado secundario, en el que se negocian los títulos tras ser emitidos, los inversores están exigiendo menos interés. El último precio pagado por las letras a seis meses también aumentó del 0,83 al 0,911%.
Con vistas al jueves
Con un objetivo más moderado, el Tesoro acudirá el jueves al mercado con una subasta de bonos a 3 y 5 años. La rentabilidad podría bajar en la primera referencia, ya que ahora los inversores exigen un 2,15% en el secundario, frente al 2,225% al que se cerró la última emisión del 19 de septiembre. En cambio, en los bonos con vencimiento en octubre de 2018 el interés puede ser muy similar al de la última colocación de principios de este mes. Por la deuda a 5 años se pagó un 3,128 % y ahora cotiza en el 3,14%.
Si el Tesoro coloca sin problemas los 2.500 millones previstos, ya solo necesitará unos 9.570 millones de euros para cubrir las necesidades planteadas para este año a medio y largo plazo.