
La futura retirada de compras de activos por parte de la Reserva Federal podría beneficiar a las firmas españolas que presenten una mayor exposición a Estados Unidos y Latinoamérica, gracias a la revalorización que experimenta el dólar.
Decía Herbert von Karajan, uno de los más destacados directores de orquesta austriacos, que "el arte de dirigir consiste en saber cuándo hay que abandonar la batuta para no molestar a la orquesta" y a pesar de que cada vez está más cerca el momento en que Ben Bernanke deje de dirigir los movimientos de la Rerserva Federal estadounidense, de momento, sigue marcando el ritmo. Aunque mucho se ha hablado de que el presidente de la Fed dejaría de interpretar la misma melodía en el mercado retirando sus inyecciones de liquidez, el director de orquesta se encargó de retrasar la llegada de una nueva partitura: la retirada paulatina del programa de estímulos o QE3 (Quantitative Easing).
Lo hizo en la última reunión del Comité de Mercados Abiertos de la Reserva Federal celebrada el pasado 18 de septiembre. Ese día, cuando el mercado entero descontaba ya un recorte de entre 10.000 y 15.000 millones de dólares en el programa mensual de compra de bonos y activos respaldados por hipotecas, Ben Bernanke, y el resto de miembros con voto en el seno del banco central estadounidense, decidió no terminar con los estímulos debido a la preocupación de que el crecimiento económico no sea lo suficientemente fuerte como para que se produzca una mejora sostenida de las condiciones del mercado de trabajo.
El mensaje lanzado por Bernanke fue claro, el mandatario esperará a ver señales fehacientes de proceso antes de ajustar el ritmo de sus compras. Aunque sigue sin haber un calendario establecido, Bernanke aseguró que la retirada podría empezar a finales de este año. El momento suscita temor y, sin embargo, son muchas las compañías españolas que podrán afinar con la nueva canción de la Fed, bien por su fuerte presencia en Estados Unidos, o bien por los negocios que presentan en Latinoamérica, donde el comportamiento de algunas divisas guarda una alta correlación con el dólar.
Si bien es cierto que desde un punto de vista bursátil lo lógico es que los índices estadounidenses registren caídas en un primer momento y, como consecuencia, los principales selectivos mundiales, en el terreno de las divisas, la retirada de estímulos provocará una revalorización del billete verde, lo que repercutirá de forma positiva en las cuentas de aquellas empresas con más exposición al otro lado del Atlántico, tal y como señala Rodrigo García, analista de XTB: "No podemos dejar de tener en cuenta que una reducción de políticas expansivas por parte de la Fed implicará una inmediata apreciación del dólar, lo que repercutirá en el tipo de cambio de las operaciones de las empresas españolas. Por tanto, una apreciación del dólar, disminuirá el tipo de cambio euro/dólar, lo cual tendrá un efecto positivo directo sobre las cifras de exportación de las compañías españolas".
Quién oirá mejor los nuevos acordes
Aunque a priori las grandes cotizadas del Ibex 35 como Banco Santander o Telefónica podrían parecer las más beneficiadas, en el mercado español existen valores cuya exposición a Norteamérica los sitúa por encima de las grandes cotizadas. En este punto, la firma que más podría beneficiarse de este cambio en la política monetaria que todavía dirige Bernanke es Grifols.
La compañía que preside Víctor Grifols es la española cotizada que más facturó en el país estadounidense, un 63,3 por ciento de sus ingreso totales -junto a Canadá-. La importancia que supone el mercado de Estados Unidos para el grupo quedó testada en la presentación de resultados correspondientes al primer semestre del año. Y es que ganó 182,8 millones de euros, un 36,9 por ciento más que en los seis primeros meses del año pasado, gracias al buen desempeño de las ventas en el extranjero. La empresa de hemoderivados destacó que en el segundo trimestre de 2013 logró un récord de facturación en términos absolutos -697,1 millones de euros- en parte por el crecimiento del 10,6 por ciento que experimentaron las ventas en Estados Unidos.
Tras Grifols se encuentra Viscofan, ya que un 27,8 por ciento de sus ingresos en 2012 provino de la primera economía del mundo. Además, el año pasado también facturó un 13,78 por ciento en Latinoamérica, por lo que sus resultados podrían sacar tajada por partida doble. En este sentido, el beneficio de la multinacional dedicada a la fabricación de tripas y envolturas artificiales para la industria cárnica se vería reforzado en un año en el que el consenso de mercado espera un incremento de sus ganancias del 2,5 por ciento, con respecto al pasado ejercicio, lo que supondría registrar el mayor beneficio de su historia.
Cercana a un 40 por ciento es también la facturación que registró en Norteamérica y México Ebro Foods en 2012. Una internacionalización que no está exenta de riesgo, puesto que el año pasado la división de arroz y pasta en Norteamérica tuvo que hacer frente a la climatología adversa generada por la escasez de lluvia y a los vaivenes en el precio de las materias primas. No obstante, el grupo espera que "tras dos ejercicios complicados en la división americana de pasta, 2013 sea un año más tranquilo, tanto por la mayor estabilidad de precios del trigo duro, como por los cambios realizados en la estrategia. Decisiones de las que esperamos resultados muy positivos a medio/largo plazo", reza el informe de los resultados correspondientes a 2012.
Además, quien no arriesga no gana y lo que en un principio puede parecer una desventaja podría convertirse en una fortaleza: "No podemos olvidar que los cambios en el dólar afectan a las materias primas. En este caso, una previsible apreciación de la moneda norteamericana va a afectar negativamente a las materias primas. Esto, lógicamente beneficiará a las empresas que necesiten gastar mucho en commodities cotizadas en dólares, ya que les será más barato adquirirlas", explican desde XTB. Un punto a favor del que también podría beneficiarse Repsol. Los ingresos de explotación de la petrolera española procedentes de Estados Unidos, Canadá y Latinoamérica rondaron el 22 por ciento, una cifra más que suficiente para aprovechar una posible caída del petróleo West Texas, barril de referencia en Estados Unidos, que en lo que va de año escala más de un 14,21 por ciento y del petróleo Brent, de referencia en Europa, pero que cotiza en dólares -en el año acumula una bajada del 1,72 por ciento-.
La importancia de Latinoamérica
Pero la retirada de los estímulos no sólo afectará a Estados Unidos, ya que el Producto Interior Bruto (PIB) de algunos países latinoamericanos también está muy ligado a las exportaciones en el país que preside Barack Obama, "por tanto, si la economía de estos países mejora, consideramos que lo más lógico es que las empresas españolas presentes en estas zonas se vean beneficiadas", apunta Rodrigo García.
Una historia que podría protagonizar el banco de mayor capitalización de España, Santander. Aunque su exposición a Estados Unidos le reportó el 10 por ciento de los ingresos en 2012, en Latinoamérica esta cifra se tradujo en un 50 por ciento. Entre los países de la región destaca Brasil, ya que en el ejercicio anterior el 26 por ciento del beneficio atribuido ordinario del banco presidido por Emilio Botín provino de allí.
Otra de las compañías que destaca por su exposición en Latinoamérica, principalmente en el país carioca también, es Telefónica. "Brasil ya representa el principal mercado de la compañía y es de donde obtienen la mayor cifra de ingresos, concretamente un 23 por ciento de los mismos", explica Victoria Torre, analista de Self Bank. La compañía que preside César Alierta está presente en 14 países de Latinoamérica, en los que en el ejercicio anterior ingresó 30.654 millones de euros, lo que supone un 50,64 por ciento de las ventas totales de la compañía. Un resultado muy similar al procedente de Latinoamérica en el primer trimestre del presente año.
De vuelta al sector bancario, BBVA ocupa uno de los primeros puestos de la orquesta española, ya que consigue unos ingresos en América superiores al 60 por ciento. De estos, un 23,6 por ciento provinieron de Latinoamérica y un 36,22 por ciento de Estados Unidos y México, convirtiéndose el último país en uno de los más destacados en la actividad de la entidad. Está presente en el país mexicano desde el 2000, a través de la marca de BBVA Bancomer. En este país la entidad logró un beneficio atribuido en 2012 de 1.821 millones de euros, un cuatro por ciento más que en el ejercicio anterior.
Las mejores posicionadas fuera del Ibex
No sólo los grandes valores de la bolsa española cuentan con una fuerte presencia al otro lado del Atlántico. Fuera del principal selectivo español también encontramos compañías que se beneficiarían si se produce un cambio de rumbo en la política monetaria de Estados Unidos. Es el caso de Prosegur y Meliá.
Mientras que la empresa de seguridad facturó más del 41 por ciento de sus ingresos en Latinoamérica, la cadena hotelera, que cuenta con instalaciones en México, Perú y Colombia, entre otros, consiguió en 2012 casi el 40 por ciento de sus ingresos en América del Sur. Por su parte, aunque CAF no desglosa su cifra de ingresos por continentes, tiene una importante actividad en Estados Unidos, México y América Latina. Entre sus proyectos se encuentra el metro de la ciudad de Medellín o el tranvía de Houston. Asimismo, casi un 20 por ciento de los ingresos de EADS en 2012 tuvieron pasaporte americano, un 13,6 por ciento facturado en Estados Unidos y un 6,27 por ciento en Latinoamérica.