La renta variable deja tras de sí una dura semana en la que todo el protagonismo lo acaparó Ben Bernanke, presidente de la Reserva Federal, al anunciar que a finales de este año podría comenzar la retirada de estímulos económicos. Aunque Wall Street consiguió recomponerse, en el Viejo Continente la situación está pasando de ser un simple ajuste a tener visos de algo más peligroso.
En EEUU, la bolsa de Nueva York logró tomper el viernes la racha de pérdidas de los últimos dos días y el Dow Jones se anotó un avance del 0,28%.
A su vez, las principales plazas europeas registraron descensos y ya han perdido dos tercios del rally alcista que empezó en los mínimos de abril. En el caso del Ibex 35, cerró la jornada del viernes en los 7.700,2 puntos, marcando nuevos mínimos anuales, y se anotó una caída semanal del 4,6%. "Mucho nos tememos que las caídas no encuentren soporte hasta los 7.500 puntos", apunta Joan Cabrero, analista de Ecotrader.
Así las cosas, Cabrero advierte de que "la cesión de los mínimos que habían marcado las bolsas del Viejo Continente hace dos semanas, que coincidían en muchos casos con lo que era un soporte natural como suponía el ajuste de dos terceras partes del tramo alcista previo, ha abierto la puerta a que la corrección de las últimas semanas pueda extenderse para ir a buscar la zona de mínimos del año donde, de forma general, se localizan los soportes clave en tendencia".