Quienes no acudieron a la conversión voluntaria de deuda que propuso Liberbank como paso previo para su salto al parqué tuvieron ayer la fecha límite para aceptar las condiciones del canje obligatorio propuesto por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob), que imponía quitas de hasta un 61,6%.
Todavía no se conoce el canje exacto, pero se calcula que, de los 110 millones de euros que quedaban por convertir, entre 70 y 80 millones han sido en acciones, con lo que el free float que tendrá previsiblemente Liberbank cuando salga a bolsa el 16 de mayo se situará en torno al 30%, mientras que las cajas presentes en su capital -Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria- se quedarían con el otro 70%. Casi 412 millones de acciones de la entidad cotizarán en el parqué.
A partir de hoy, Liberbank iniciará una ronda de contactos con inversores cualificados, ya que, para evitar una salida masiva de los recientes accionistas (en algún caso obligada para fondos que sólo puedan invertir en deuda), se creará un mercado de compraventa antes de que cotice. El 29 de abril se comunicará el rango de precios inicial y cualquier inversor que lo desee puede comunicar su intención de venta de hasta la mitad de las acciones que haya recibido en la conversión y sin que supere el millón de títulos -el bróker que lleva el proceso es Renta 4-. Después de que el 9 de mayo se comunique el precio final, los inversores tendrán un día para confirmar o modificar sus órdenes.