La certeza de que el euro saldría adelante fue lo que permitió que la gestora de Caja España mantuviese el tipo en 2012: "Nuestra premisa fue tener claro que el euro no se rompía. Con ese escenario claro, vimos buenas oportunidades en verano que supimos aprovechar y dieron muy buenas rentabilidades para el fondo".
La gestora, que ha recibido el galardón al mejor plan de pensiones de renta variable en España por Morningstar, se mantiene en una posición de cautela ante el buen arranque de año que han protagonizado los mercados ya que, según destacan, lo más importante en estos momentos es "no dejarnos llevar por la euforia inicial, muchas de las mejoras de estimaciones y previsiones que estamos viendo nos parecen demasiado optimistas. Si bien la situación es mejor, vemos que el sistema financiero español tiene problemas pendientes por resolver, el mercado inmobiliario se debe seguir ajustando, seguimos viendo a bastantes empresas con niveles de deuda excesivos".
De cara a las estrategias para este año, Caja España aboga por valores en los que la "reestructuración va a jugar un papel importante en la mejora de la capacidad de generación de caja". Y es que la gestora sigue apostando por "empresas con fuerte capacidad de generación de caja, niveles de deuda sostenibles y estabilidad en ventas". Además, este ejercicio mantendrá para el fondo "la filosofía de inversión de los últimos años". En cuanto a la economía española, creen que lo peor ya ha pasado y que el sector exterior seguirá dando gratas sorpresas.
No obstante, les "preocupa mucho la evolución de las cuentas públicas, el ajuste inmobiliario, la evolución del crédito y la generación de empleo". Un gran objetivo para el presente ejercicio es que "la empresa media española debe poder financiarse a niveles similares que sus competidores europeos".
