Los alcistas no están muertos ni estaban de parranda. Ayer volvieron a la carga tanto en Europa como en EEUU, lo que en principio parece confirmar que la recaída del miércoles fue una corrección del rally del martes antes de seguir subiendo. Que no deja de ser lo lógico. Pero ahora el rebote tiene que demostrar que es más sólido que todos los fallidos intentos alcistas anteriores. Y hoy tendrá una prueba de fuego con el IPC de Estados Unidos.
Europa recuperó ayer a última hora después de una sesión claramente bajista. Aunque, para ser precisos, el único índice que recuperó en serio fue el Ibex, de nuevo impulsado por el furor especulativo en el sector energético. Pero la remontada sí fue clara en Wall Street, donde las nuevas caídas iniciales dieron paso a un cierre alcista: el Dow Jones se anotó el 0,29%, el S&P 500 (más castigado la víspera) recuperó el 0,51% y el Nasdaq avanzó un notable 0,88%.
Detrás de esta vuelta al optimismo hay que señalar un informe de Standard & Poor's en el que señala que los bancos pueden haber terminado ya las grandes amortizaciones de activos ligados a créditos fallidos.
Falta de garantías
Pero el escenario sigue siendo muy oscuro: un fondo de Carlyle se encuentra al borde de la quiebra por la imposibilidad de aportar las garantías que le piden los bancos acreedores y las ventas minoristas -la clave de la economía norteamericana- cayeron el 0,6%, mucho más de lo previsto. Y el propio secretario del Tesoro Paulson aconsejó a la banca reconsiderar el reparto de dividendos para fortalecer su capital.
Además, en otros mercados las cosas no mejoran. El petróleo alcanzó los 11 dólares, aunque corrigió un poco al cierre, y el euro llegó hasta 1,56 dólares, nuevo récord histórico. Esta caída del dólar permitió que el oro alcanzara brevemente la mítica barrera de los 1.000 dólares.
Confianza del consumidor
Así las cosas, el IPC de esta tarde se antoja decisivo: se espera una subida del 0,2% tanto en la tasa global como en la subyacente. Ayer, los precios de importación salieron algo mejores de lo esperado. Además, hoy se publicará la confianza del consumidor.
El cierre semanal se antoja muy importante desde el punto de vista técnico para intentar dilucidar si hemos hecho un suelo fiable o simplemente nos encontramos en un nuevo rally de mercado bajista.