Efecto Bankia. Así se podría denominar al castigo que han sufrido las entidades españolas en bolsa después de que saltaran todas las alarmas tras la nacionalización de BFA, la matriz de Bankia. Este factor, junto a la recapitalización adicional que la cuarta reforma financiera exige al sector ha tenido una clara consecuencia en el parqué durante los últimos quince días.
Y es que el sector financiero ha vuelto a actuar como refugio de los inversores bajistas -aquellos que toman posiciones con la expectativa de que un título baje para vender más tarde y ganar con la diferencia- según los últimos datos publicados por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) a fecha de 18 de mayo. Así, la presencia de estos inversores se ha acentuado en toda la banca, con dos excepciones. La de BBVA y Sabadell, que se han librado de su ataque.
Las posiciones cortas se han reducido hasta el 0,6% en el caso de la entidad presidida por Francisco González, lo que supone la cifra más baja desde finales de marzo; mientras que en Sabadell, los bajistas han disminuido hasta el 1,97%. El porcentaje más bajo desde finales de abril.
Sin embargo, el retroceso de este tipo de inversores en los valores financieros no ha sido la tónica general en la última quincena. Tras seis meses sin la posibilidad de invertir en este tipo de valores, después de que la CNMV prohibiera esta operación en agosto hasta febrero por la extrema volatilidad que sacudía al sector, los bajistas han redescubierto la debilidad de nuestros bancos cotizados. En esta última quincena, Popular ha sido el más afectado. Así lo demuestra el hecho de que un 6,82% de su capital esté controlado por este tipo de inversores después de que hayan aumentado más de un punto porcentual en las últimas dos semanas. Se trata del porcentaje más elevado desde que la CNMV hace público estos datos.
El ataque de los osos también ha afectado a Bankinter con un 6,74% y a Santander con un 0,61%. En ambas, las cifras vuelven a ser récord. Lo mismo ha ocurrido con Bankia. Aunque un gran número de inversores ha sufrido con el contínuo descenso de sus títulos, los bajistas tampoco han hecho el agosto con sus caídas. Y es que sólo un 0,66% de su capital está en manos de este tipo de inversores.
Además de la banca, otras 16 compañías más han despertado el interés en este tipo de inversores. Mediaset, BME, FCC, Acerinox, Técnicas Reunidas o Red Eléctrica son, después de Popular, las empresas en las que más han aumentado las inversiones en corto, al menos en 0,3 puntos porcentuales.
Por el contrario, los bajistas sólo se han replegado en otros siete valores de la bolsa española, además de en BBVA y Sabadell. Gamesa o Indra, que son algunos de los valores favoritos por excelencia entre los osos, han sido dos de los que han experimentado los mayores retrocesos.
