MADRID (Reuters) - El Ibex-35 registraba cambios leves a la baja el jueves a mediodía tras una apertura alcista, después de que el Tesoro superase la otra prueba de fuego que tenía esta semana emitiendo deuda dentro de los planes que se había marcado, aunque los inversores siguen manteniendo la cautela hacia España.
En su novena subasta de bonos a medio y largo plazo del año, la institución pública colocó deuda ligeramente por encima del objetivo de 2.500 millones de euros.
"Las ratios de cobertura han sido muy buenos e incluso con tipos por debajo de cómo estaban cotizando en el mercado secundario y del nivel que esperábamos", dijo Estefanía Ponte, economista de Cortal Consors.
Tras la subasta, que se esperaba con mucha expectación en los mercados internacionales, el diferencial de la deuda española a 10 años frente a su equivalente alemán se mantenía en 417 puntos básicos, frente a los 424 pb de las últimas transacciones del miércoles.
A las 1301 horas, el Ibex 35 cedía un 0,21 por ciento a 7.065 puntos, después de haber registrado en la víspera su peor caída en casi seis meses, mientras que el paneuropeo Eurofirst ganaba un 0,57 por ciento.
"El Tesoro ha aprobado un examen importante, aunque el impacto en la bolsa ha sido muy neutro", dijo un operador en Madrid.
Soledad Pellón, estratega de mercado de IG Markets, atribuyó esta tibia reacción a las dudas del mercado respecto a España.
"El pesimismo sobre España es máximo y esto lleva a buscar siempre la parte negativa de todo dato que se publique. En este caso, la mala interpretación viene por parte de los bancos españoles", dijo.
"Dado que estas subastas del Tesoro vienen principalmente soportadas por la banca nacional, el mercado ha querido entender que la fuerte demanda de hoy expone aún más a nuestros bancos a la deuda española, haciéndolos más vulnerables al riesgo país", agregó la analista.
Entre los grandes valores de mercado, Banco Santander cedía un 0,35 por ciento mientras que BBVA caía un 1 por ciento tras haber sufrido el miércoles la elevada morosidad del sector.
Telefónica bajaba un 0,4 por ciento, e Iberdrola seguía de capa caída y bajaba un 0,7 por ciento sufriendo todavía los efectos de la venta de un 3,7 por ciento de su capital por parte de su accionista ACS, que perdía un 1,6 por ciento.
Analistas interpretaron esta operación como un fiel reflejo del exceso de apalancamiento en empresas españolas que gravita sobre el horizonte del sector privado doméstico.
La petrolera Repsol caía un 1,2 por ciento tras conocerse que Argentina también quiere tomar el control de YPF Gas.
En el sector financiero, Caixabank cotizaba peor que otros bancos rivales y cedía un 1,9 por ciento tras comunicar una caída del 84 por ciento en sus beneficios del primer trimestre tras provisionar todas las necesidades requeridas por el Gobierno en el marco de la reforma financiera.
En el Ibex, destacaba el avance superior al 1,3 por ciento de Inditex después de que Berstein comenzara su cobertura con 'igual que mercado' y un precio objetivo de 73 euros.
Por último, la central de reservas de viajes Amadeus subía un 4 por ciento tras conseguir un contrato plurianual en Norteamérica con la agencia de viajes online Expedia.
Relacionados
- Las bolsas europeas suben antes de la subasta de deuda española
- La rentabilidad de la deuda española sube después de subasta
- La Bolsa de Tokio cae a la espera de la subasta de deuda española
- La bolsa española cae un 2% tras la subasta de deuda italiana
- La bolsa española cae un 2% tras la subasta de deuda italiana