
El apetito por el riesgo de los inversores sigue dando muestras de crecer, al menos en EEUU. Además del incremento de las emisiones de bonos basura y de bonos corporativos, destaca el resurgimiento de un tipo de bonos, los denominados PIK, que permiten devoluciones en especie, y que son todavía de mayor riesgo. Algunos expertos apuntan a que se podría estar volviendo a las prácticas financieras que desembocaron en la crisis que estalló en 2008.
Según recoge CNNMoney, desde comienzos de año, se han emitido casi 58.000 millones de dólares en bonos basura (alto rendimiento, altor riesgo) por parte de 95 empresas, el comienzo de año más intenso en los últimos 15 años, según Dealogic.
Los bonos con grado de inversión, de menor rendimiento y mayor seguridad, también han atraído a los inversores, y se han emitido 150.000 millones en el mismo periodo de tiempo, algo más que en los dos últimos años, pero todavía lejos de 2007, 2008 y 2009.
Vuelven los bonos PIK
Pero aunque estos dos datos podrían hablar por sí solos sobre la vuelta del apetito por el riesgo, lo que realmente ha llamado la atención ha sido el resurgir de un tipo de bono, el "toggle-pay-in-kind" o PIK, una estructura que permite pagar en especie (mediante acciones, nuevos bonos o incrementos del principal) en lugar de realizar los pagos en efectivo.
La vuelta de estos bonos PIK es el primer signo claro de que ha vuelto la era de financiación previa a la crisis, según los expertos consultados por la cadena americana.
La semana pasada, Goldman Sachs, la firma de capital riesgo GS Capital y Advent International emitieron 600 millones de dólares en bonos PIK con un interés del 9,625% para ayudar a financiar la compra de TransUnion por 3.000 millones de dólares. Con este tipo de bonos, tiene la opción de emitir más deuda en lugar de realizar los pagos en efectivo a sus deudores.
"Este acuerdo ha atraído la atención de todo el mundo porque muestra que realmente hay apetito por estos títulos de riesgo", aseguró Richard Farley, socio de la firma de abogados Paul Hastings. Ahora, tras el éxito de la fórmula, fuentes financieras dicen a la CNN ya hay más operaciones en marcha con este tipo de financiación que podrían ser anunciadas en las próximas semanas.
En teoría, este tipo de bonos tiene beneficios para las compañías emisoras, ya que da más opciones si se encuentran en problemas, ya que pueden retener liquidez en lugar de pagar los intereses. Sin embargo, en la práctica, las compañías con estas estructuras de financiación han caído en bancarrota mucho más a menudo. Según Moody´s, casi el doble que las compañías con la misma cantidad de deuda pero financiadas más tradicionalmente.
El renacimiento de los bonos PIK es solo un signo de que los mercados vuelven a funcionar como antes de la crisis, al menos en EEUU. Pero también pueden traer las malas prácticas que derivaron en la crisis financiera que estalló en 2008: como asegura un operador, es el primer signo de que ha vuelto la "promiscuidad financiera".