Los expertos rechazan incrementar posiciones en el banco por la visión sectorial y por la dilución que provoca
Banco Sabadell poseía ya una clara recomendación de venta antes de realizar la ampliación de capital para reforzarse y absorber la CAM y ahora, una vez en marcha la operación y con un esquema de protección de activos del 80%, el sentimiento sigue siendo el mismo. Los expertos no invitan a acudir a la ampliación, que comienza hoy y en la que el banco pretende captar unos 913 millones de euros mediante la emisión de 691,8 millones de nuevas acciones, no sólo por la dilución que prevén sino también por una cuestión de visión sectorial.
"No acudiríamos a ninguna de estas ampliaciones que pudieran tener lugar en el futuro próximo, y aprovecharíamos eventuales repuntes en las cotizaciones para salir de la forma más convenientemente posible", apunta Félix González, socio director de Capitalia Familiar. La escasa visibilidad del sector y la falta de suficiente confianza son algunas de las cuestiones que argumentan, aunque también lo es el gran descuento con el que se realiza la operación. El precio de emisión de las nuevas acciones que se podrán comprar a partir de hoy es de 1,32 euros, un 45% inferior al precio al que cerraron ayer los títulos de la entidad después de repuntar casi un 3,5% como consecuencia de la barra libre de liquidez del BCE.
En el caso de que la ampliación de capital se suscriba en su totalidad, Sabadell y la CAM
tendrán en conjunto un total de más de 2.300 millones de acciones frente a los 1.615 millones que poseía Sabadell antes de la operación.
Si es para especular, sí...
La experiencia es un grado y, por eso, l
as casas de análisis estiman que no es un buen momento para aventurarse y tomar más posiciones en el valor. "Recomendamos estar fuera de los bancos españoles así que animamos al inversor a vender sus derechos", aseg
uran desde Banca March. Pero puede haber una excepción... "Sólo aconsejamos incrementar posiciones en Sabadell si es con carácter especulativo", afirman desde Metagestión. Y es que el banco puede experimentar los mismos efectos que en su día sufrió Unicredit, por ejemplo, quien protagonizó grandes descensos en los primeros días de la ampliación por su dilución para luego rebotar.
"Se pueden comprar las acciones después de la bajada de los primeros días para venderlas una vez se hayan recuperado", dice Soledad Pellón, analista de IG Markets. La restructuración del sector y las dudas sobre la CAM son otros de los motivos que pueden penalizar la compra de estas nuevas acciones durante los próximos quince días.