Visa, el gigante estadounidense de tarjetas de crédito, anunció este lunes su próxima entrada en Bolsa, con la que pretende recaudar hasta 18.700 millones de dólares, un récord en Estados Unidos, en la que sería la primera gran operación en Wall Street desde la crisis hipotecaria.
Por su volumen, la operación sería, por un amplio margen, la más grande intentada en Estados Unidos, donde el actual récord lo ostenta AT&T Wireless, la rama de "teléfonos celulares" del operador de telecomunicaciones estadounidense AT&T, que fue vendida en 2000 por 10.600 millones de dólares.
Sin embargo, incluso en el caso de que prospere la oferta en su precio máximo propuesto, Visa quedaría por detrás del gigante bancario chino ICBC, que, impulsado por el apetito de los inversores locales, obtuvo 21.900 millones de dólares cuando fue distribuida en octubre de 2006 entre las bolsas de Shanghai y Hong Kong.
Visa, actualmente propiedad de un grupo de bancos, anunció que quiere poner en venta sus títulos a partir del momento en que el organismo regulador de la bolsa estadounidense (SEC) lo autorice.
Los planes de Visa de entrar a la bolsa se conocen desde octubre de 2006, pero la anterior estimación sobre el volumen de la operación, difundida en noviembre de 2007 en un documento de la SEC, sólo era de 10.000 millones de dólares como máximo.
En total, teniendo en cuenta el margen más alto de la banda del precio de introducción, situada entre 37 y 42 euros por acción, la operación podría revalorizar a la empresa hasta los 40.000 millones de dólares.
Desde hace varios meses, el emisor de tarjetas bancarias había preparado sus estructuras para esta operación, sobre todo dotando de independencia a Visa Europa.
El anuncio de Visa tiene lugar cuando en Wall Street no se ha producido ninguna entrada importante en bolsa desde el verano boreal, principalmente a causa de las turbulencias que han sacudido a los mercados financieros.
En junio, el poderoso fondo de inversiones Balckstone obtuvo 4.130 millones de dólares, lo que supuso la mayor introducción en bolsa en Wall Street de los últimos cinco años. El lunes, las acciones de Blackstone valían 15,5 dólares cada una en la bolsa de Nueva York, exactamente la mitad de su precio de entrada.
El gran rival de Visa, la estadounidense Mastercard, comenzó a cotizar en bolsa en mayo de 2006. La operación fue un evento, pero supuso un volumen de menos de 2.400 millones de dólares y el contexto económico y financiero de la época no tenía nada que ver con el de ahora.
Tras esperar su momento durante más de un año, Visa se prepara así a dar el paso cuando la desconfianza todavía impera en los mercados financieros, pero también en un momento en el que el mercado del crédito al consumo en Estados Unidos sufre seriamente los efectos de la desaceleración de la economía nacional.
Los créditos renovables, que a menudo están asociados a la posesión de una tarjeta de crédito, aumentaron a un ritmo anual de 2,7% en diciembre en Estados Unidos, frente a 13,77% de noviembre y 11,1% en octubre, según la Reserva Federal (Fed).
Paralelamente a la ralentización del crédito al consumo, los bancos ya han constatado un aumento de las tasas de morosidad de los préstamos ya contratados.
El gigante bancario Citigroup ha hecho provisiones por 3.310 millones de dólares por impagos en su cartera de créditos al consumo sólo para el cuarto trimestre, frente a los 127 millones del mismo periodo del año anterior.
Como argumento a favor de Visa se destaca la estructura casi duopolística del mercado de las tarjetas bancarias a nivel mundial, que puede dar confianza a los eventuales inversores.
tu/fga/pap//ja
Relacionados
- El Chelsea quiere conservar a Lampard y Drogba
- Siemens quiere suprimir 3.000 empleos en una división de Alemania
- Siemens quiere recortar 7.000 empleos en su división de telefonía
- BAA quiere conseguir 1.000 mln libras con aval de aeropuertos regionales Prensa
- El alcalde de Ciudad de México quiere revivir la lengua azteca