
David Riley, jefe de deuda soberana de Fitch, ha asegurado hoy que no ve una solución integral para la actual crisis de la Eurozona, y ha destacado que la Eurozona, tal y como está diseñada, "está rota". Además, ha defendido que el BCE tiene capacidad para expandir todavía más su balance.
Respecto a Grecia, ha asegurado que va a hacer default, pero que permanecerá en la moneda única. El miedo actual deriva de un posible impago desordenado que eleve el riesgo de fugas de capital y que acabe rompiendo la Eurozona.
Sin embargo, Riley asegura que la agencia de calificación no espera que se rompa el euro, aunque no puede ser descontado del todo.
Mientras, cree que Portugal no tiene el riesgo de impago actualmente de Grecia, especialmente por los compromisos de sus políticos.
"El gobierno está comprometido y es creíble. La economía está altamente endeudada, pero están trabajando en organizar un intercambio de deuda", explicó en una conferencia en Nueva York. "Es la estrategia adecuada y a corto plazo plazo no vemos a Portugal como un riesgo significativo para el resto de la Eurozona".
Riley asegura que Italia es "crucial para el éxito" del euro, y que la prima de riesgo de este país tiene que caer por debajo de 200 puntos básicos y al mismo tiempo tienen que crecer las expectativas de crecimiento.
Asimismo, ha culpado a la interdependencia entre gobiernos y bancos de la crisis.