Era una posibilidad plausible para los expertos, aunque estimaban que tardaría más en producirse. Al contrario: en coherencia con su decisión del viernes, por la cual quitó el rating AAA a Francia y Austria, ayer la agencia Standard & Poor's (S&P) decidió retirarle la triple A (nota equivalente a una matrícula de honor) a la Facilidad Europea de Estabilidad Financiera (FEEF, también conocida coloquialmente como fondo de rescate), al recortar la nota de sus emisiones en un escalón, hasta AA+.
Una decisión no exenta de polémica, pero coherente, puesto que la nota del fondo de rescate se sostenía precisamente por las triple AAA de Francia y Austria, junto con Alemania, Finlandia, Holanda y Luxemburgo. Máxime teniendo en cuenta que Francia es uno de los países que más aporta a este instrumento.
Dentro de esta cadena de rebajas, la secuencia lógica hacia la que apuntan los bancos de inversión es a que también se encarezcan los costes de financiación del aún nonato Mecanismo Europeo de Estabilidad o fondo de rescate permanente (MEDE). "Si los responsables de las políticas europeas quisieran doblar la capacidad de préstamo del MEDE a niveles anteriores a las rebajas de rating, entonces el MEDE necesitaría un capital exigible equivalente a casi el 30% del Producto Interior Bruto (PIB) de la zona euro!", razonan desde Royal Bank of Scotland.
En este sentido, el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, aseguró ayer que el fondo de rescate permanente entrará en vigor antes de lo previsto, el próximo julio. "Nuestros mecanismos contra la crisis están en proceso de reforzamiento. El Mecanismo Europeo de Estabilidad entrará en vigor en julio de 2012, es decir, antes de lo previsto", adelantó.
Encorsetar los dólares
Van Rompuy atendió así una de las demandas de Mario Draghi. El presidente del Banco Central Europeo (BCE) pidió ayer ante el Parlamento Europeo que los Gobiernos de la zona euro adelanten la puesta en marcha del fondo de rescate permanente y que apliquen por completo sus acuerdos de reforzar el fondo de rescate temporal, de manera que ambos mecanismos sirvan para recapitalizar bancos de países que no estén sometidos a programas de rescate.
Al mismo tiempo, Draghi, en calidad de presidente del Consejo Europeo de Riesgos Sistémicos, instó a los supervisores bancarios de la UE a que vigilen de cerca y limiten si es necesario los riesgos debidos a la exposición en dólares estadounidenses de los bancos del Viejo Continente. En concreto, lamentó que haya "un desajuste significativo entre la madurez de los activos a largo plazo y el pasivo a corto plazo en dólares estadounidenses".
La opinión de los expertos
En este contexto, como explica Iván Martín, de Aviva, el recorte del fondo se entiende porque "la razón de ser de la FEEF son los países europeos que lo promovieron". Sobre esta premisa, "si la calidad crediticia media de dichos países baja, lo lógico es que la FEEF se vea afectada", agrega. En cuanto a las repercuciones, los expertos lo tienen claro: los costes a los que se financia el fondo crecerán. "Con la rebaja de rating se reducen las garantías y, por tanto, los inversores exigirán tipos de interés más alto para prestarle dinero", explica Ricardo Sánchez-Seco, de Gestiohna. "Además, ese sobrecoste es un problema porque los tipos de interés que tienen que pagar los países que hasta ahora utilizan ese fondo [Grecia, Portugal e Irlanda] son fijos", añade. "La implicación más directa sería un encarecimiento del coste de financiación de dicho vehículo", coincide Iván Martín.