PARIS (Reuters) - El hombre más anciano de Francia, un veterano de la Primera Guerra Mundial que rechazó una medalla y habló enérgicamente sobre los horrores de las batallas, murió a los 110 años, dejando sólo a un veterano vivo de la "guerra que acabaría con todas las guerras".
Cazenave sobrevivió tanto a la Batalla de Somme en 1916 como a la Segunda Batalla de Aisne un año más tarde, dos de los episodios mas sangrientos de la Primera Guerra Mundial.
De Cazenave describió al patriotismo como "una forma de hacer que la gente se trague cualquier cosa", y a la guerra como absurda e inútil.
De Cazenave se negó a la oferta de un funeral de Estado, pues dijo que mostraría una falta de respeto a las víctimas de la guerra que nunca tuvieron el mismo honor. *.