La Reserva Federal debería adoptar un objetivo de crecimiento de PIB, afirman los economistas de Goldman Sachs ante una oleada de discursos de miembros del banco central.
En una nota publicada el viernes por la noche, Goldman asegura que la mejor forma de que el banco central relaje aún más su política de forma significativa es ese objetivo de PIB y que se comprometa a comprar más activos para lograr alcanzarlo. "Aunque un cambio a un nivel objetivo de PIB nominal sería una gran decisión, sería coherente con el mandato dual de la Fed de empleo y precios", escriben estos economistas.
La nota llega en vísperas de que varios representantes de la Fed hablen esta semana, incluyendo al presidente Ben Bernanke el martes y a la vicepresidenta Janet Yellen el viernes.
Por el momento, la Fed no tiene un objetivo formal de inflación ni de empleo, aunque informalmente persigue una inflación en torno al 2% anual y presiona para que el empleo llegue a niveles "naturales", que la mayoría de los economistas sitúa entre el 5% y el 6%.
Dos objetivos en uno
El presidente de la Fed de Chicago Charles Evans ha sugerido que la Fed podría comprometerse a no subir tipos hasta que el desempleo baje a un nivel del 7%-7,5%, siempre que la inflación subyacente (sin energía ni alimentos) no supere el 3%.
Por su parte, el presidente de la Fed de Nueva York y anterior economista jefe de Goldman, William Dudley, ha sugerido que si la inflación supera el objetivo del banco central por medio punto porcentual el próximo año, la Fed podría anular esa desviación con una subida adicional de medio punto más adelante.
La idea de un objetivo de PIB nominal nueva y los economistas de Goldman citan un estudio de 1994 de Robert Hall y Gregory Mankiw, que afirma que "tal objetivo sería una regla razonablemente buena para dirigir la política monetaria". También aconsejaban fijar el objetivo de renta nominal y no de tipo de cambio.
Dado que el PIB nominal es el nivel de precios multiplicado por el PIB real -y dado que el PIB real está íntimamente relacionado con el empleo- tener un objetivo de PIB nominal incorpora los dos objetivos de la actual política de la Fed, según los economistas de Goldman.
Las ventajas de dicha política son que el banco central se compromete a ignorar los excesos o defectos de inflación, de modo que los hogares y empresas deben esperar una subida de la inflación después de un período de debilidad económica. También hay una gran necesidad de impulsar la economía ahora, porque los desempleados de largo plazo empiezan a tener dificultades para volver a ser empleables.
"Eso justifica dar más peso a la parte de la producción y el empleo del mandato dual que en circunstancias normales", según Goldman. Hasta ahora, la Fed ha dado pasos extraordinarios para reactivar la economía. Los tipos oficiales se sitúan en un mínimo histórico entre el 0% y el 0,25%, el balance del banco central se ha ampliado hasta 2,9 billones de dólares y la Fed se ha comprometido a cambiar 400.000 millones de activos por activos de vencimientos más largos. Asimismo, la Fed se ha comprometido a mantener los tipos bajos hasta mediados de 2013.