Las subidas volvieron a marcar por tercera semana consecutiva la tónica de los mercados financieros europeos, en donde el Ibex no fue ni mucho menos un mero convidado de piedra a la hora de apuntarse a las revalorizaciones.
De hecho el principal selectivo español llegó a superar la cota de los 9.000 puntos el pasado miércoles aunque al día siguiente acusó el mal de alturas y corrigió en parte la sobrecompra de las tres primeras sesiones de la semana para terminar el viernes en los 8.975,50 puntos.
Con todo, la subida acumulada en la semana por el índice fue del 2,01 por ciento. Con lo que suma un avance superior al 12 por ciento en el conjunto de las tres últimas semanas, la racha alcista mas larga del indicador español desde abril. Eso si, el repunte de la última semana fue inferior al de los principales índices europeos que se revalorizaron un 3,07 por ciento en el caso del Ftse 100, un 3,95 el Cac 40 y un 5,14 por ciento el Dax 30.
Todo ello durante unas cinco jornadas en las que no faltaron sustos, pero tampoco alegrías para los mercados de renta variable. Empezando por el bloqueo por parte de Eslovaquia de la ampliación del fondo de rescate griego, que el parlamento de ese país terminó aprobando una vez se produjo la crisis de gobierno. También el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, se hizo notar con su anuncio de llevar a cabo una recapitalización coordinada de los bancos de la UE con el objetivo de que puedan resistir al agravamiento de la crisis de deuda y evitar que se repitan casos como el del banco franco-belga Dexia, que ha tenido que ser rescatado por segunda vez. Unas palabras que alentaron las alzas dentro del sector financiero. Otros de los factores que propiciaron que las compras se sobrepusieran a las ventas fueron las buenas referencias macroeconómicas que vinieron el viernes tanto de China como de EEUU. Por un lado la inflación del gigante asiático se frenó hasta el 6,1 por ciento. Por otro, Wall Street también tiró al alza, gracias al dato de ventas minoristas que crecieron en un 1,1 por ciento.
Las calificadoras vuelven a la carga
Las agencias de rating tampoco quisieron pasar inadvertidas y en esta ocasión tanto la deuda soberana española como las emsiones a largo plazo de los bancos españoles fueron el foco de sus iras. Concretamente Standard and Poor's (S&P) rebajó la solvencia de España en un escalón, desde AA a AA-. También sacó la tijera con el Banco Santander y BBVA a quienes degradó la calificación de AA a AA-, con perspectiva negativa. A su vez rebajó de A a A- las notas de Banco Sabadell, Bankinter, Kutxa, BBK, CECA e IberCaja, y puso en la lista de posibles revisiones a la baja al Banco Popular que, de momento, tiene la calificación A- . En su castigo a las financieras la agencia S&P encontró en Fitch a un compañero de viaje. La calificadora europea, también recortó la nota de seis bancos españoles: Banco Santander, de AA a AA-; Banesto, de AA a AA-; BBVA, de AA- a A+; CaixaBank, de A+ a A, y Banco Popular, de A a BBB+, dejándoles a todos en perspectiva negativa, con lo que no se descarta recortes futuros.
No obstante, frente a la penalización de la agencias de rating la prima de riesgo española aguantó el envite, la brecha de rentabilidad entre el bono español a 10 años y su homólogo alemán se redujo hasta los 304 puntos básicos. La actuación del Banco Central Europeo (BCE) ayudó, ya que por novena semana seguida, ha salido de compras a los mercados secundarios de renta fija. Su última adquisición, 2.312 millones de euros en títulos de deuda de la eurozona.
Más sintomas
El retorno del apetito por el riesgo también se ha dejado notar en otros confines de los mercados financieros. En el de divisas, ha alimentado la semana más alcista del euro contra el dólar desde enero, con la que además ha interrumpido una secuencia bajista de tres semanas consecutivas de descensos. En el conjunto de las cinco últimas jornadas, la moneda única se ha apreciado un 3,4 por ciento contra el billete verde, hasta los 1,384 dólares. El ánimo comprador ha alcanzado igualmente a las materias primas, especialmente al petróleo. El barril Brent, de referencia en Europa, se ha anotado un avance semanal del 8 por ciento, la mayor desde febrero, y ha escalado hasta los 114,3 dólares. También ha vuelto a subir el oro, que se ha revalorizado un 2,2 por ciento, hasta los 1.673 dólares.