WASHINGTON (Reuters) - El caldeado debate en el Congreso de Estados Unidos esta semana sobre si aumentar o no el salario mínimo de 5,15 dólares la hora ha dividido no sólo a los políticos, sino también a los economistas, quienes difieren sobre si esa medida ayudaría a los trabajadores pobres.
"Todos los días el salario mínimo no se incrementa, continúa perdiendo valor y las familias trabajadoras se quedan más atrás", dijo el senador Edward Kennedy, el demócrata sobre cuya enmienda fue rechazada el miércoles en una votación que siguió básicamente las líneas partidistas.
El salario mínimo no ha subido desde septiembre de 1997, a pesar de que desde entonces los demócratas han intentado varias veces que se apruebe una legislación al respecto.
Mientras, los partidarios de un mayor salario mínimo intentan lograr aumentos en varios otros estados.
/Por Kelly Evans/.*.