
Como ocurre en la Fórmula 1, que se lleva el campeonato a casa aquel piloto que suma más puntos una carrera tras otra y no quien cruza en primer lugar más veces la línea de meta -pregúntele al finlandés Raikkonen con quién se identifica él-, para haber conseguido ganar la carrera a la bolsa en 2007 no ha sido suficiente con colocar la directa, aferrarse al asiento y no salirse de la carretera de la renta variable como en los años anteriores.
Más bien, ha hecho falta ajustarse el cinturón, tener sangre fría, consensuar direcciones y saber eludir las curvas peligrosas de los bancos, las constructoras y las inmobiliarias sin dudar ni un momento. Algo que supo hacer el equipo de análisis de CM Capital Markets.
Esta firma, que es una de las 48 que colaboró el año pasado en la elaboración de la Cartera de Consenso de elEconomista, no sólo consiguió crear una estrategia con la que ganar más de un 30 por ciento -tres veces más que el mercado-, sino que consiguió batir en cada trimestre a la bolsa, llevándose el premio a la regularidad.
Su equipo de análisis previene de que la época de volatilidad no ha terminado y aconseja, para ganar el gran premio de 2008, apostar por empresas de elevada capitalización y ser más selectivo que nunca.
¿Contaban con un ejercicio bursátil tan ajetreado como el que acabamos de clausurar?
Pensamos que a todo el mundo le ha sorprendido la crisis subprime estadounidense. No así la subida del precio del crudo, ya las estimaciones de varios grandes bancos de inversión internacionales ya auguraban precios tan altos. Lo que ha venido después, como las inyecciones de liquidez de los bancos centrales y la rebaja de tipos de interés en Estados Unidos, no han sido imprevistos, sino actuaciones para tratar de paliar la crisis.
El primer tropezón del año, el sufrido por las inmobiliarias y las constructoras, ¿sí se esperaba?
La crisis del sector inmobiliario en Europa, y en España más en concreto, ha sido menos avisadada que la de Estados Unidos. En este país ya se llevaban publicando malos datos de construcción de viviendas desde hace dos años, algo que indicaba que este sector no se estaba recuperando.
No obstante, en España, además, se estaba pagando en bolsa ilusión, no valoración, y una intensa actividad corporativa.
En pocos meses las constructoras decidieron fusionarse, salir de compras… una herencia de 2006 que el mercado pensaba que podría continuar. Eso ha provocado que algunas personas hayan mantenido las acciones en cartera, a pesar del descenso... pero no se han recuperado, mientras que los índices sí lo han hecho.
Pero ustedes también eludían al sector constructor en la cartera propuesta para la estrategia de consenso en el inicio de 2007...
En todo momento tuvimos esterilizada la cartera de esos valores, pero porque a principios del ejercicio ya no nos parecían atractivos por criterios fundamentales. Preferíamos a los valores seguros, como Telefónica, y aquellos sectores que estaban de moda, y que continuarán estándolo, como son las energías renovables. Pensamos que ante una posible corrección, una cartera con esa composión sufriría menos que el mercado.
El perfil de su cartera actual, compuesta por Gamesa, Telefónica, Santander, Tubacex y REE es bastante parecido. ¿También esperan un año de fuertes altibajos?
La deducción es sencilla: un escenario con incertidumbre e inestabilidad es igual a volatilidad. Y eso obliga a ser muy selectivo en valores...incluso dentro de los mismos sectores. Mire los bancos, existen unos que se mantienen en máximos, como Santander, y otros que están muy abajo. Eso explica la cartera: valores con fuerte peso en los índices, como Telefónica y Santander, líquidos, y que por valoración sean atractivos. Si, además, puedes jugar a algún sector con ingresos recurrentes y que pueda ser susceptible de movimientos corporativos, mejor.
Entre todos ellos, quizás quien menos se adapta a su descripción es Tubacex. ¿Por qué les gusta?
En general, aconsejamos que se tenga mucho ojo con los chicharros, igual que con las constructoras. Pero Tubacex, aunque es una compañía con mediano/pequeño valor bursátil, nos gusta porque vende un producto muy específico -le ocurre algo similar a Gamesa-, que no tiene muchas competidoras. Además, las petroleras, que mejoran sus ingresos en la medida en que el crudo cotice al alza, pueden permitirse renovaciones de equipos.
¿Por qué prefieren a Santander antes que a BBVA?
Por una mera fortaleza cuando se observa el análisis técnico. Pensamos que si un valor lo hace bien, puede continuar haciéndolo. En cambio, por ese mismo prisma, a BBVA lo vemos más débil. Antes se observaba que estos valores estaban muy relacionados, algo que ha dejado de ocurrir. Santander se ha ido más hacia arriba, manteniéndose cerca de máximos, y la entidad financiera presidida por Francisco González, no.
¿En qué capítulo del folletín 'subprime' está la banca europea?
Realmente en lo que respecta a Europa está todo por salir, porque Estados Unidos va por delante en transparencia.
¿Piensan que el último duro para los próximos doce meses se ganó en los máximos de noviembre?
No sabemos si a doce meses pero a corto plazo creemos que sí. Es muy probable que en la mayoría de valores sí que haya podido ganarse, aunque siempre habrá alguno que se salve.
¿Y en los emergentes? Muchos expertos apuestan por Asia...
Con China, un día puedes ganar un 20 pr ciento y perderlo el siguiente. Se puede recomendar pero para objetivos de riesgo muy elevados. Vemos un contexto de incertidumbre mundial. Para ellos también.