
El Tesoro afrontaba su primer examen después de que el BCE decidiera echarle un capote a España e Italia comprándoles títulos de deuda. La emisión era de letras a 12 y 18 meses y el objetivo, captar entre 5.000 y 6.000 millones de euros. Prueba superada y, además, pagando menos rentabilidad.
"Los mercados son soberanos. Pero la tensión que sufren, en una parte elevada irracional en mi opinión, se traduce en una fuerte volatililidad en los precios de la subasta. La demanda, por otro lado, sigue siendo elevada. Y este es el factor que más tenemos que resaltar", comenta José Luis Martínez, estratega de Citi.
La ayuda del BCE
La actuación del BCE ha generado cierta distensión en los mercados financieros y se preveía que ésta pudiera trasladarse a esta subasta, de manera que suponga un punto de inflexión respecto a la tendencia que arrastra desde mayo de este año el Estado de tener que otorgar una rentabilidad cada vez mayor en cada emisión para colocar este tipo de valores.
Y así ha sido. El Tesoro ha logrado colocar 5.700 millones de euros en los títulos que ha subastado hoy. Y lo ha hecho pagando menos rentabilidad que en anteriores ocasiones, de hecho, el rendimiento que ha ofrecido por las letras a 12 meses se ha quedado en el 3,33%, un 9,7% menos que en la anterior subasta, cuando el tipo ascendió al 3,7%. En el caso de las letras a 18 meses, la rentabilidad se ha quedado en el 3,59%, frente al 3,91, lo que supone un 9,7% menos.
La demanda, sin embargo, ha sido menor, 2,14 veces la oferta frente a 2,18 veces en las letras a un año y 3,23 veces la oferta frente a 5,49 veces en las letras a año y medio.
Si bien es cierto que en ese momento la presión que ejercían los mercados sobre la deuda española era bastante distinta a la actual. Ejemplo de ello se aprecia en la prima de riesgo. Si el 19 de julio la brecha que separaba la compensación que daba el bono español a 10 años respecto a la de su homólogo alemán era de 341 puntos básicos, a día de hoy se mueve entorno a los 266.
Interpretaciones
El analista de CM Capital Market Jorge Lage considera que España "ha aprovechado la calma producida por la intervención del BCE para colocar un alto importe sin ningún problema". "Es también interesante la bajada del interés, que convierten a las Letras del Tesoro en un producto interesante", ha señalado.
En esta misma línea ha incidido Virginia Romero (Ahorro Corporación), ya que "es un interés elevado para ser una emisión a corto plazo, pero que ofrece a los inversores un beneficio interesante", y de esta manera lo convierte "en un producto competitivo, lo que se refleja en la alta demanda".
Romero también ha resaltado la importancia de la intervención del BCE en el mercado de deuda con el fin de aportar "estabilidad y confianza", algo que parece haber conseguido y que "debe seguir realizándose como elemento disuasorio ante la especulación".
Por último, Álvaro Blasco (Atlas Capital) ha valorado como "muy positiva" la emisión de hoy, y aunque "siguen siendo intereses caros para una emisión a tan corto plazo, es esto precisamente lo que le convierte en un claro competidor de los depósitos porque son muy competitivos".
"Todavía nos esperan algunos escalones de volatilidad por vivir, pero la aparición del BCE ha sido muy positiva, y debe mantenerse como medida disuasoria", concluye.