
La demanda de petróleo crudo y gas aumentará en los próximos años debido principalmente al tirón de China y otras economías emergentes. El repunte de la demanda, junto con la limitación de la producción y las consecuencias de la crisis económica en los más desarrollados ha creado "uno de los períodos más inciertos en décadas".
Según indica la Agencia Internacional de la Energía (AIE) en su informe de perspectivas a medio plazo indica que el crecimiento de la demanda mundial de crudo será de unos 1,2 millones de barriles diarios por año entre 2010 y 2016.
Así, la demanda mundial de crudo aumentará desde los 88 millones de barriles diarios del año pasado hasta los 95,3 millones en el año 2016 y la eficiencia en el empleo del crudo aumentará un 3% anualmente.
El 41% del incremento neto de la demanda previsto entre 2010 y 2016 le corresponderá a China y el total acumulado de 7,2 millones de barriles diarios en los que aumentará aquella en el período procede completamente de países que no son miembros de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico).
En cuanto a los precios, la agencia, aunque aumenta entre un 15 y un 20% sus estimaciones del año pasado sobre la evolución en los próximos, sitúa el precio medio del barril de crudo desde 2010 a 2016 en los 103 dólares.
Ayer, el precio del petróleo se anotó importantes caídas, tanto el barril de referencia en EEUU como el europeo. El Texas se anotó bajadas del 5% y retrocedió a su nivel más bajo desde el pasado 22 de febrero. Por su parte, el Brent cerró hoy con una bajada del 2,54% hasta los 117,10 dólares.
El papel de la OPEP
En cuanto a la oferta de crudo, la AIE estima que aumentará desde los 93,8 millones de barriles diarios de 2010 hasta los 100,6 millones de barriles diarios en 2016, con un incremento medio anual de 1,1 millones diarios.
El informe aborda la situación de Libia y afirma que solo en 2014 la producción de ese país volvería a situaciones como las de antes del conflicto actual, es decir, de en torno a 1,6 millones de barriles diarios.
Así, la AIE insta a la OPEP a que incremente su producción hasta una media de 30,1 millones de barriles diarios este año, lo que supone 400.000 barriles diarios más de lo que estimaba en sus anteriores previsiones.
"Hay una necesidad clara de que la organización eleve su proporción", afirma la Agencia Internacional de Energía. "Hay señales claras de que Arabia Saudí y otros países aceptarán el reto. De lo contrario, existe el riesgo de implicaciones perjudiciales" para la economía global.
En cuanto al gas, la demanda mundial crecerá un 2,4 % de aquí a 2016 y de nuevo aquí la mayor parte del crecimiento procederá de los países ajenos a la OCDE, señala el informe.