ISLAMABAD (Reuters) - El presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, negó el lunes los rumores que recorren Pakistán respecto a que algunos de sus subordinados, descontentos con su decisión de imponer el estado de emergencia, le mantengan retenido en su casa.
Los medios de comunicación recibieron llamadas de ciudades de todo Pakistán, incluida Karachi, donde los mercados de valores han caído un 4,7 por ciento debido a la incertidumbre política.