KARACHI (Reuters) - Las explosiones causadas el jueves por un supuesto ataque suicida durante el paso de la comitiva de la ex primera ministra de Pakistán Benazir Bhutto dejaron hasta 45 muertos cuando hacía su entrada triunfal en Karachi, horas después de volver a su país tras ocho años de autoexilio, según periodistas de Reuters presentes en hospitales de la capital.
Los extremistas vinculados con Al Qaeda, enojados con el apoyo de Bhutto a la guerra de Estados Unidos contra el terrorismo, habían amenazado con asesinarla.
Al menos dos docenas de heridos ingresaron en el hospital de Jinnah, la mitad de ellos graves.
Información de inteligencia sugirió que al menos tres grupos yihadistas vinculados con Al Qaeda estaban planeando ataques suicidas.
Durante años, Bhutto prometió volver a Pakistán a poner fin a la dictadura militar, aunque ha regresado como aliada potencial del presidente Pervez Musharraf, el jefe del ejército que llegó al poder en 1999 mediante un golpe de estado.
