La calma parece haber llegado de nuevo a Wall Street. Después de que los bajistas tomaran las riendas del parqué americano, los toros -característicos de un mercado alcista- han vuelto a situarse a la cabeza. En la última semana, cerca del 38% de los inversores se mantuvo al alza, frente a un 35% de bajistas.
El cambio de tendencia que experimentó Wall Street la semana anterior no ha tenido continuidad. La sobreventa que se produjo en Estados Unidos llevó al Dow Jones a perder la barrera psicológica de los 12.000 puntos pero, tras recuperar los niveles, el optimismo volvió al parqué. Según la encuesta realizada por la Asociación Americana de Inversores Individuales (American Association of Individual Investors), los alcistas han repuntado más de nueve puntos porcentuales (del 28,49% al 37,76%) en los últimos cinco días y ya se sitúan en la misma barrera que a comienzos de mes.
Por su parte, el aumento de los alcistas ha venido de la mano de un descenso tanto de bajistas como de neutrales. Y eso que los datos macroeconómicos presentados en EEUU esta semana no han acompañado. Por un lado, la producción industrial bajó inesperadamente un 0,1% en febrero, cuando se esperaba un aumento del 0,6 por ciento, y las ventas de viviendas nuevas y de segunda mano en el mismo mes también defraudaron. Pese a ello, los bajistas se han recortado desde el 40,12% de la semana pasada (el mayor porcentaje desde la primera semana de septiembre) al 35% actual.
No obstante, los datos que se desprenden del estudio invitan a los inversores a mantenerse prudentes. Y es que pese a la mejora de la última semana, el balance en lo que va de año es muy negativo. Impulsados por la crisis en Oriente Medio y seguido por la incertidumbre sobre cuál puede ser el impacto real de la crisis nuclear de Japón, los inversores alcistas del mercado americano se han desplomado drásticamente en casi 20 puntos porcentuales (desde el 56% al 38%) desde que comenzó el ejercicio, mientras que los bajistas han aumentado en casi 17 puntos.