La Reserva Federal ha emitido ya las notas de fin de curso para los 19 bancos que se sometieron a la prueba de estrés para determinar su salud financiera. De momento, parece que los alumnos aventajados no han perdido ni un segundo puesto que entidades como JP Morgan y Wells Fargo han reinstaurado sus dividendos.
El banco central de EEUU ha restringido los pagos y bonificiaciones hasta un máximo del 30 por ciento de los ingresos registrados por las entidades financieras.
BB&T ha declarado ya un aumento de dividendo trimestral del 6,7 por ciento hasta 16 centavos por acción. Además, el banco de Carolina del Norte pagará un dividendo especial en el segundo trimestre, lo que elevará el dividendo total hasta los 17 centavos de dólar. En el caso de JP Morgan Chase, la entidad capitaneada por Jamie Dimon eleva su dividendo trimestral hasta los 25 centavos de dólar desde los cinco centavos establecidos previamente. Además autoriza un programa de recompra de acciones por valor de 15.000 millones de dólares.
En el caso de Wells Fargo, la entidad ha elevado su dividendo hasta los 12 centavos por acción desde los cinco centavos por título que repartía hasta ahora. Para ello, el banco emitirá un dividendo especial de 7 centavos de dólar. Como JP Morgan, la entidad ha autorizado una recompra de acciones por valor de 200 millones de dólares.
Otros alumnos como Citigroup, Bank of America o Goldman Sachs todavía no han dado a conocer decisiones similares. De acuerdo con los datos dados a conocer por la Fed, el capital bancario de EEUU se ha incrementado en más de 300.000 millones de dólares desde finales de 2008 hasta 2010. La mejora del contexto económico y la posiciones de efectivo de los grandes bancos de EEUU han convencido a Ben Bernanke y sus chico para permitir que algunas de estas entidades aumenten su dividendo.