ROMA (Reuters) - El primer ministro italiano, Romano Prodi, dijo el miércoles que estaba preocupado por la fortaleza del euro y que había hablado largo y tendido sobre el tema con la canciller alemana, Angela Merkel, que le mostró también su preocupación.
Responsables europeos han mostrado su creciente pesar en las últimas semanas a medida que el euro alcanzaba nuevos máximos contra el dólar y se espera que intenten consensuar un texto nuevo más claro sobre el asunto cuando el G-7 se reúna en Washington este mes.
La política estadounidense sobre el dólar era "muy obsequiosa con los intereses nacionales", dijo Prodi en una reunión de periodistas extranjeros.
Italia parece estar en el G-7 con Francia, que ha sido la más clara al pedir un euro más débil.
La ministra italiana de Asuntos Europeos, Emma Bonino, dijo el martes que veía que el euro alcanzaría pronto el 1,50 dólar.
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