Roma, 13 jun (EFECOM).- El ex consejero delegado de la Banca Popolare Italiana (BPI) Giampiero Fiorani, investigado por irregularidades en el intento fallido de compra de Antonveneta, fue puesto hoy en libertad, con obligación de presentarse dos veces a la semana ante la Policía de Lodi (norte del país).
La misma medida fue decretada por la jueza de Milán Clementina Forleo, para el ex director general del banco Gianfranco Boni, acusado con Fiorani de asociación para delinquir, especulación abusiva y apropiación indebida.
El plazo de prisión preventiva terminaba hoy para ambos investigados y la Fiscalía no consideró necesario pedir una prórroga, aunque era posible teniendo en cuenta los delitos que se investigan.
Tanto Fiorani como Boni accedieron al arresto domiciliario el pasado nueve abril, después de permanecer internados en la prisión milanesa de San Vittore desde el 13 de diciembre.
Fiorani no quiso hoy hacer declaraciones a los periodistas que le contactaron a través de portero automático de su domicilio en la localidad de Lodi
Desde su detención, tanto Fiorani como Boni han comparecido frecuentemente ante los investigadores para ser interrogados y han colaborado con la Justicia.
Con el nuevo régimen decidido por la jueza, Fiorani y Boni podrán salir de su domicilio y desplazarse por Italia, pero tiene prohibido viajar al extranjero.
La jueza también concedió la libertad, con obligación de presentarse cada día ante la Policía, al abogado mercantilista Silvano Spinelli, y el financiero Fabio Massimo Conti, arrestados por el mismo caso. EFECOM
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