
Las dudas sobre España parecen haberse disipado, por el momento, después de que, a finales de 2010, el acoso de los mercados se hizo más patente ante el temor a un contagio entre los países periféricos. La solvencia de España ha dejado de andar en la cuerda floja por un tiempo, y son muchos los organismos que descartan que el país necesite un rescate, especialmente tras las últimas reformas y ajustes anunciados.
Entre las instituciones que confían en España figura Scottish Widows Investment Partnership, una de las empresas de gestión de activos más grande de Europa, parte del Grupo Lloyds. La empresa, que dispone de 42.000 millones de dólares en deuda de distintos Estados, se muestra 'neutral' sobre España, según explica a Bloomberg Graeme Caughhey, jefe del departamento de bonos de Scottish Widows. "Desde luego, España no encabeza la lista de países que causan problemas a nuestros clientes", explica Caughey.
Para justificar su apoyo, Caughey recuerda el resultado positivo que han logrado las recientes subastas del Tesoro español, la última la celebrada este jueves, cuando el erario público ha colocado 3.506 millones en bonos a 3 y 5 años, en la parte media del rango previsto y con una rentabilidad más baja que la de la anterior subasta.
El ejecutivo recuerda que mañana se celebra la cumbre de jefes de Estado y Gobierno de la Unión Europea donde discutirán, probablemente, la posibilidad de ampliar el tamaño del fondo de rescate. Del mismo modo, se debatirá sobre la posibilidad de flexibilizar su uso, de manera que pueda comprar bonos y dar líneas de crédito preventivas a los Estados miembros en dificultades, tal como pide España, o incluso proporcionarles financiación para que recompren sus títulos de deuda.
"Es muy improbable que España necesite un rescate". No hay nada en particular sobre España, piensa Caughey salvo, en línea con lo que creen muchos otros, "que es demasiado grande para ser rescatada".
Scottish Widows mantuvo estables sus inversiones en deuda española a lo largo del pasado año y vendió parte de deuda griega. En cambio, Caughey explica que no tenía ninguna inversión en bonos irlandeses. La entidad también ha aumentado la proporción de sus inversiones en bonos del estado italianos.