
Jornada importante la que afrontan los mercados europeos, con la crisis de deuda soberana de nuevo marcando lo que pasa en los parqués internacionales, a la espera de la cumbre de la UE que comienza. Ni EEUU ayer ni Asia hoy consiguen sacudirse el miedo que provoca la Eurozona. De momento, el euro cotiza plano, a la expectativa y Europa apunta hacia una apertura plana con sesgo bajista.
Ayer en Wall Street, el Dow Jones volvió a ver frustrado su intento de perforar la resistencia de los 11.500, aunque aguantó sobre el soporte de los 11.450 enteros. Otro día entre dos trincheras a la espera de la cumbre de la UE.
Una sesión más "no se han podido perforar los 11.500 puntos en el Dow Jones, pero la buena noticia es que el índice ha aguantado por encima del primer soporte de los 11.450. Si se perdieran sí habría riesgo de ver una confirmación de deterioro a muy corto plazo", apuntaba Carlos Doblado, analista de Bolságora.
Ayer los índices estadounidenses, a pesar del que el dato de inflación fue ligeramente menor de lo esperado y de que los resultados de la encuesta manufacturera de Nueva York fueron excepcionales, experimentaron ligeros recortes. Descensos del 0,1% en el caso del Dow y del 0,4 y 0,5%, respectivamente, en el Nasdaq y S&P 500.
La última cumbre de 2010
Parece que los problemas europeos pesan también en Wall Street. El anuncio de Moody´s de que ponía en perspectiva negativa el rating de España (a la que arrebató la triple A en septiembre) no sentó nada bien a los mercados, a ninguno de los dos lados del Atlántico.
Por ello, hoy será especialmente importante estar atentos a cómo se desarrollen los acontecimientos en la última Cumbre de la Unión Europea del año. No se espera que haya novedades importantes, pero el mercado pide que los países sean más enérgicos y explícitos a la hora de establecer soluciones para la crisis de deuda que ya atenaza a varios miembros de la eurozona y amenaza con salpicar a unos cuantos más.