Las Bolsas mundiales continuaban bajo presión este miércoles a raíz de nuevos indicadores estadounidenses desalentadores que reforzaban los temores sobre la solidez de la reactivación de la primera economía mundial.
La situación afectaba también al euro, que retrocedía ante el dólar y se cotizaba a 1,2650 USD hacia las 16H00 GMT, contra 1,2670 el martes por la noche.
En Europa, las principales plazas bursátiles volvieron a cerrar en baja este miércoles: Londres perdió 0,90%, París -1,17%, Fráncfort -0,61% y Madrid -1,57%.
De su lado, la Bolsa de Nueva York intentaba reducir sus pérdidas a media sesión tras un mal arranque: el Dow Jones perdía 0,24% y el Nasdaq 0,05% hacia las 15H55 GMT.
En América Latina, la Bolsa Mexicana de Valores abrió con una pérdida de 1,12% y la de Sao Paulo con una caída de 0,38%.
En Asia, el índice Nikkei de la Bolsa de Tokio volvió a ceder este miércoles, con una pérdida de 149,75 puntos (-1,66%) que lo hizo caer a 8.845,39 unidades, su nivel más bajo de 2010.
"Los inversores ya no pueden ignorar, parece, la realidad de la situación económica mundial, que sigue siendo mala, y por eso huyen de los mercados", indicó el experto Phill Gillett, de Spreadex.
Un nuevo indicador decepcionante en el sector inmobiliario norteamericano acentuó en particular las preocupaciones de los inversores sobre la solidez de la reactivación en Estados Unidos.
Las ventas de viviendas nuevas cayeron en julio a su nivel más bajo desde 1963, según cifras oficiales publicadas este miércoles por el departamento de Comercio en Washington.
El martes, se había dado a conocer que las ventas de viviendas existentes en Estados Unidos cayeron a su nivel más bajo desde 1995.
El mercado inmobiliario estadounidense perdió a fines de abril el apoyo de un crédito impositivo acordado bajo ciertas condiciones a los compradores de su primera vivienda.
Por otra parte, el Departamento estadounidense de Energía (DoE) anunció este miércoles un alza espectacular y completamente inesperada de los 'stocks' petroleros en Estados Unidos, un nuevo elemento de duda en cuanto a la reactivación.
Los stocks de crudo, que ya la semana pasada se situaban en su nivel más alto en 20 años, registraron un alza de 4,1 millones de barriles (mb) a 358,3 mb, en la semana finalizada el 20 de agosto. Los analistas interrogados por la agencia Dow Jones Newswires anticipaban por el contrario un descenso de 200.000 barriles.
En ese marco, los precios del petróleo no mostraban una dirección concreta el miércoles al cierre de los intercambios europeos.
Hacia las 16H00 GMT, el barril de Brent del Mar del Norte para entrega en octubre se vendía en Londres a 72,64 dólares, mientras que el barril de West Texas Intermediate (WTI, denominación del 'light sweet crude' negociado en Estados Unidos) para entrega en septiembre cotizaba en Nueva York a 71,53 USD.