Luxemburgo, 1 jun (EFECOM).- El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, se mostró hoy "convencido" de que la empresa española Inditex, propietaria de la marca Zara, no ha utilizado a niños para coser sus zapatos en Portugal, aunque advirtió de que, en el caso de que las acusaciones se probaran, las sanciones "serían gravísimas".
"Estoy convencido que no es así. No tengo ninguna información, pero no puedo darle crédito", dijo Caldera a su llegada a un consejo de Empleo que se celebra hoy en Luxemburgo.
El ministro recordó que ya "ha habido otras acusaciones en Portugal, siempre interesadas, sobre la actitud de los empresarios españoles que nunca se han confirmado".
En particular, recordó el "grave accidente de trabajo que hubo en Granada" el pasado mes de noviembre, en el que murieron cinco trabajadores portugueses de la construcción que "estaban perfectamente en regla y sus derechos habían sido íntegramente garantizados".
"Yo no puedo creer que esa información sea cierta, y menos de una empresa de tal importancia", insistió.
No obstante, indicó que las inspecciones de trabajo deberán estudiar las denuncias "con toda energía" y advirtió de que "si se demostrara que se han producido esos hechos, por supuesto las sanciones serían gravísimas"
Hace unos días, el semanari luso "Expresso" indicó que Inditex ha anunciado que investigará la supuesta utilización de niños para coser sus zapatos por una fábrica subcontratada en Portugal.
La revista publicó un reportaje con fotografías de niños de la zona rural de Felgueiras, en el norte de Portugal, una región muy afectada por el desempleo, que supuestamente cosen en el interior de sus casas zapatos de la marca Zara.
Inditex se incorporó en octubre de 2005 a la Ethical Trading Initiative (ETI), organización que agrupa a compañías internacionales de distribución, grandes proveedores, sindicatos y ONGs, con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de los trabajadores de las empresas proveedoras. EFECOM
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