BRUSELAS, 29 (EUROPA PRESS)
La Comisión Europea reiteró hoy que las subidas salariales en España deben ser inferiores a la media de la eurozona para compensar así la baja productividad y recuperar competitividad respecto al resto de Estados miembros. La recomendación se incluye en el informe trimestral sobre la zona euro, en el que se destaca que en 2006 se registró un crecimiento del 2,6% de media entre los países que comparten la moneda única --la cifra más alta desde el año 2000-- y que se crearon cerca de dos millones de empleos. Las previsiones para el año 2007 se mantienen "favorables".
El informe dedica un apartado a la contribución de la evolución de los salarios a la estabilidad de precios y a la competitividad en la zona euro. Todos los indicadores demuestran que la moderación salarial prevaleció en 2006, aunque para el futuro existe un riesgo al alza. Pese a ello, "las reformas de los mercados de bienes y trabajo y la presión de la globalización contribuirán a contener las pretensiones salariales excesivas".
El Ejecutivo comunitario destaca no obstante que existen importantes diferencias entre los países de la eurozona en cuanto a la evolución de salarios y productividad. Tanto Alemania como Austria han registrado aumentos salariales medios del 2% entre 1999 y 2005, mientras que el incremento de la productividad en ambos países se situó en torno al 1,5%, lo que hizo que los costes laborales unitarios sólo subieran en torno al 0,5%.
En el caso de España, los suelos subieron una media del 3% durante el mismo periodo, pero la productividad sólo mejoró un 0,4%, lo que supone que el aumento de los costes laborales unitarios se encuentren entre los más altos de la eurozona (2,6%), junto con Portugal (3,5%), Irlanda y Luxemburgo (2,9%), Grecia (2,8%) y Países Bajos e Italia, que están al mismo nivel que España.
En términos generales, el Ejecutivo comunitario cree que las proyecciones a medio y largo plazo "no apuntan a un peligro inminente a la estabilidad de los acuerdos salariales". No obstante, este pronóstico se altera "dramáticamente" cuando se examina país por país. "Este es particularmente el caso de Italia, Portugal, España y Grecia que, para recuperar competitividad tendrán que mantener el crecimiento de costes laborales unitarios por debajo de la media de la eurozona", señala el informe.
DATOS POSITIVOS
El estudio destaca que el PIB de la zona euro creció el cuarto trimestre de 2006 un 0,9% --en España un 1,2%-- estimulado por el vigor de la demanda interna y el fuerte crecimiento de las exportaciones. El consumo se mantuvo estable y las inversiones en el sector de la construcción se beneficiaron de las buenas condiciones meteorológicas.
El empleo aumentó un 0,3% en el cuarto trimestre y un 1,4% en el conjunto del año, lo que constituye la tasa anual más alta desde 2001. El paro cayó en enero de 2007 al 7,4%, la cuota más baja desde 1993. En el conjunto del año, el PIB creció un 2,6% frente al 1,4% de 2005.
El crecimiento se ralentizará temporalmente durante el primer trimestre de 2007 por la subida del IVA en Alemania, pero las previsiones siguen siendo favorables. La confianza de las empresas y los consumidores se mantiene a un nivel elevado y la Comisión mantiene la previsión de crecimiento del 2,4% para este año publicada en febrero.
El comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, destacó el pasado lunes en el Eurogrupo que las recientes turbulencias registradas en los mercados financieros no han afectado a las previsiones de crecimiento de la UE aunque dijo que habrá que vigilar de cerca la evolución porque supondría un "riesgo a la baja" que se reproduzcan nuevas bajadas en las bolsas.