
Los alcistas levantan el pie del acelerador y el índice de referencia de la bolsa española vuelve a cotizar en los alrededores del 10.400 tras haber marcado máximos del día en 10.543 puntos con alzas de casi el 2,5%. BBVA y Santander siguen liderando la reacción del mercado con ganancias del 3%. La bolsa española no corrige el mal endémico de su deuda.
"El hueco de la apertura, como suele suceder en este tipo de situaciones, se presume clave para el corto plazo. Así, mientras los índices no cierren este hueco, esto es, que eventuales caídas no profundicen por debajo de niveles donde ayer cerraron, no habrá signos de deterioro destacable en el intento de rebote en la renta variable", comentan los analistas de Ecotrader.
"Ahora bien, si este hueco se cierra todo apuntaría a que la reacción alcista de las dos últimas jornadas habría sido un simple rebote por sobreventa y las caídas podrían volver a imponerse con intensidad", añadían.
"Después de cuatro semanas consecutivas de caídas no puede descartarse que un rebote pueda ser importante, sin perjuicio de que la tendencia bajista siguiera manteniéndose", señalaba Joan Cabrero en su comentario de media sesión.
Las referencias del día
El día tendrá como referencias en EEUU el déficit comercial y el presupuestario, pero la atención se centrará en un Comité del Congreso sobre la retirada de los programas de liquidez de la Fed, en el que intervendrá Bernanke.
Todo ello aparte de las novedades que puedan llegar sobre Grecia, especialmente desde Alemania y desde Francia, donde se reúnen Sarkozy y Papandreou.
Euforia contenida en Wall Street
Los malos augurios que dejaba la sesión del lunes en Nueva York quedaron borrados de un plumazo al cierre europeo, cuando se conoció que Alemania está dispuesta a acudir al rescate de Grecia (y se supone que también de España, llegado el caso). Esto dio un vuelco radical a los mercados de deuda europeos -los bonos alemanes se desplomaron y los griegos y españoles se dispararon- y encendió los cohetes en Wall Street, que se vino arriba de forma clara.
Sin embargo, esta euforia no se mantuvo hasta el fin de la sesión, sino que se moderó notablemente al cierre. El Dow Jones acabó con un alza del 1,52% (eso sí, recuperó los 10.000 puntos), el S&P 500 se anotó el 1,3% y el Nasdaq, menos castigado en las jornadas anteriores, el 1,17%.
Estos avances, aunque son notables, no bastan para dar por terminado el susto. De momento, parece que se impone una consolidación lateral y no un rebote mayor. Y una vez que el mercado consolide, todavía existen grandes probabilidades de que vuelva a caer ya que no se han recuperado los importantes niveles perdidos en el desplome de la semana pasada.