Bruselas, 27 mar (EFECOM).- Los ministros de Finanzas de los 27 (Ecofin) lograron hoy un acuerdo unánime sobre la directiva de servicios de pago, que permitirá abaratar los pagos dentro de la UE y que supone un claro avance hacia el establecimiento de un área única de pagos en la Unión.
La presidencia alemana de turno de la UE consiguió salvar las reticencias de los Estados miembros, divididos entre los partidarios de un enfoque liberal, como el Reino Unido, y los que preferían un planteamiento más tradicional, haciendo hincapié en los derechos de los consumidores, encabezados por Francia.
La norma establece un marco legal común de los 27 que permitirá acceder a los mercados financieros a nuevos proveedores, creará unas condiciones iguales para todos los operadores, aumentará la transparencia en el funcionamiento del mercado y la fijación de precios y mantendrá una elevada protección del consumidor.
El objetivo es que los pagos transfronterizos -con tarjeta de crédito o débito, transferencia electrónica, ingreso en cuenta o cualquier otro medio- sean "tan fáciles, baratos y seguros como los pagos dentro del territorio nacional", recordó hoy el comisario de Mercado Interior, Charlie McCreevy.
Para ello, se eliminarán las barreras que hoy afrontan los proveedores de servicios de pago para operar en otro Estado miembro y se permitirá acceder al mercado a entidades no bancarias, lo que conducirá a un incremento de la competencia y redundará en precios más baratos.
Entre otras novedades, la directiva busca asegurar que una transferencia electrónica sea efectiva en el plazo máximo de un día desde la emisión de la orden.
La Comisión Europea calcula que la superación de la actual fragmentación de los sistemas de pago podría redundar en un ahorro para el conjunto de la economía europea de 28.000 millones anuales.
El Parlamento debe dar su visto bueno al texto, que tras la aprobación formal y definitiva del Consejo podría entrar en vigor el 1 de noviembre de 2009.
El presidente de turno del Ecofin, el ministro de Finanzas alemán Peer Steinbrück, incidió en la rueda de prensa posterior al encuentro en los beneficios que esta normativa acarreará a los ciudadanos, no sólo por los menores costes sino porque también se reducirá la burocracia en las operaciones transfronterizas.
Los efectos de la norma se revisarán tres años después del comienzo de su aplicación, según el acuerdo al que llegaron hoy los 27.
El Ecofin también dio hoy su respaldo político a la directiva sobre evaluación de adquisiciones en el sector financiero, que establece un procedimiento único para que los reguladores nacionales analicen las operaciones transfronterizas en el sector financiero.
El objetivo primordial de la norma, que obtuvo el apoyo de todos los Estados miembros excepto Polonia, es incrementar la claridad y transparencia en el proceso de evaluación de este tipo de operaciones y reducir el riesgo de interferencia política.
La directiva unifica los criterios de evaluación de las operaciones, así como los requisitos de notificación, y reduce los plazos y la posibilidad de los reguladores nacionales de "parar el reloj" durante el proceso de autorización.
Previsiblemente, el texto se aprobará sin discusión en la próxima reunión formal del Ecofin, dado que la Eurocámara ya lo respaldó en primera lectura.
Los ministros debatieron, por último, el reparto de poder en el Fondo Monetario Institucional (FMI), ante la próxima reunión del organismo multilateral los próximos 14 y 15 en Washington, que tratará de avanzar en la reforma del sistema de gobierno. EFECOM
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