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Riesgos políticos descienden, pero nacionalizaciones nuevo reto para empresas

Madrid, 30 ene (EFECOM).- La complejidad de riesgos, las políticas arbitrarias y las nacionalizaciones se han convertido en los nuevos retos a los que se enfrentan las multinacionales, según el Mapa de Riesgo Político y Económico 2007 de AON, en el que se destaca que los riesgos políticos en el mundo han disminuido.

El estudio, presentado hoy en Madrid, identifica los principales riesgos cambiarios, económicos y políticos de las empresas en el mercado internacional, ya que se han convertido en un factor "clave" para la toma de decisiones empresariales por las pérdidas que éstos generan cada año a compañías extranjeras e inversores.

Según se explicó en la presentación de la consultora especializada en seguros AON, la nacionalización de intereses económicos, desde el intervencionismo de los gobiernos, se ha convertido en uno de los principales riesgos políticos, especialmente para las empresas españolas, ya que España es el segundo mayor inversor en Latinoamérica.

Javier Valero (Aon Credit) incidió en la "preocupación" que despiertan estos procesos entre las compañías españolas y recordó que mientras en Mercosur se mantiene "una política ortodoxa" fiscal y económicamente, en algunos países andinos se "cambian las reglas del juego" por parte de gobierno nacionalistas y la nueva percepción que tienen de las riquezas naturales.

Sin embargo, el estudio refleja que aunque todavía surgen nuevos retos, los niveles de riesgo político en el mundo mejoran y en la edición de este año, en la que se han estudiado 214 países de diferentes zonas geográficas, 17 países han mejorado su calificación de riesgo con respecto a la edición anterior y sólo dos cuentan con mayores niveles de riesgo (Libia y Sudán).

Las interrupciones en la cadena de suministros, debido en gran medida a que las empresas cuentan con distintos puntos de producción en diferentes países, también son destacas como riesgo en el informe, en el que se hace hincapié en que la distribución del riesgo en los últimos años ha hecho que aumente en los países con un nivel bajo o medio-bajo de riesgo y descienda entre los de medio, medio-alto y alto.

Entre los países con alto riesgo -localizados en Asia, África, antigua Unión Soviética, Oriente Medio, Sudamérica, Europa del Este y Caribe-, la interferencia política se ha reducido, mientras que el riesgo de huelgas y disturbios sociales ha aumentado.

Georgia, Bielorrusia, Pakistán, Costa de Marfil, Somalia, Ecuador, Siria, Indonesia, Tayikistán, Irak, Líbano, Palestina, Sudán, Yemen y Uzbekistán son los países que concentras un mayor número de riesgos, mientras que los países emergentes BRIC (Brasil, Rusia, India y China) tienen un riesgo medio y medio-bajo.

Entre las compañías susceptibles de tener riesgo político en sus actividades se encuentran, principalmente, las de fabricación, minería, empresas de gas, aviación, energéticas, y de telecomunicaciones, así como las de leasing -arrendamiento financiero-.

También pueden verse afectadas por estos riesgos políticos las entidades financiaras, sobre todo aquéllas que se dedican a la financiación de proyectos y a la financiación internacional.

Ante estos riesgos, el seguro de crédito protege a las empresas con respecto a los contratos firmados y los activos en estos países en un entorno de mayor complejidad de riesgos en la que se prevé un crecimiento de la economía mundial en 2007 cercano al 4,6 por ciento y el precio del crudo en torno a los 66 dólares por barril. EFECOM

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