
El 7 de julio comenzaba la temporada de publicación de resultados correspondientes al segundo trimestre. El mercado se enfrenta a estas publicaciones con tono temeroso, y no han hecho más que hacerse públicos los primeros y parece que los inversores no saben muy bien por qué decantarse.
De los más sonados de la semana han sido los de Alcoa. El fabricante de aluminio superaba las expectativas de los analistas, más por el recorte de gastos que por las ventas. Parece que a corto plazo seguiremos sujetos a la incertidumbre.