El grupo estadounidense PepsiCo inauguró este miércoles en Domodedovo, cerca de Moscú, su fábrica europea más grande, medio siglo después de que la célebre bebida apareciera en la Unión Soviética, comprobó una periodista de AFP.
"Rusia es de una importancia vital para PEPSICO (PEP.NY), declaró la directora del gigante de las bebidas sin alcohol, Indra Nooyi, durante una ceremonia, agregando que el grupo iba a invertir "mil millones de dólares (adicionales) los tres próximos años".
Esta fábrica, que se extiende sobre unas 70 hectáreas tiene una capacidad de 2.100 millones de litros por año, "será la más grande de PepsiCo en Europa para una producción de bebidas sin alcohol y la embotelladora más grande del grupo en el mundo", destacó la empresa en un comunicado.
Las inversiones del grupo en Rusia, en donde emplea a 12.000 personas, alcanzaron los 3.000 millones de dólares los últimos diez años.
El lanzamiento se produce en un momento simbólico cuando el presidente estadounidense, Barack Obama, terminó una visita a Rusia destinada a relanzar las relaciones bilaterales.
La historia de PepsiCo en Rusia comenzó en julio de 1959, cuando uno de los fundadores de la empresa, Donald Kendall, le dio de probar una Pepsi al líder soviético Nikita Kruchev en ocasión de una exposición estadounidense en Moscú.
En 1974, Pepsi se convirtió en el primer producto occidental de consumo corriente en ingresar en el mercado soviético.