
Cada vez hay más evidencias del apetito hacia la renta fija. Con el reclamo de unas rentabilidades más altas, no vistas en años, los fondos que invierten en deuda corporativa acumulan ya doce semanas consecutivas de entradas de dinero en Europa, según los datos de Bank of America, que reflejan que la semana terminada el pasado 11 de enero captaron alrededor de 4.600 millones de dólares (unos 4.200 millones de euros al cambio), que es la cifra más elevada en 78 semanas, es decir, desde el verano de 2021.
Ese interés por la renta fija se palpa, también, en que la demanda de nuevas emisiones, que llegan a ofrecer rentabilidades del 4%, supera con creces la oferta. A cierre del martes pasado, la demanda de las nuevas emisiones de deuda lanzadas en Europa rondaba los 474.000 millones de euros, según Bloomberg. Esta cifra supera en 3,25 veces la oferta, de 145.500 millones de euros, según esta misma agencia.
A pesar del deterioro de la economía, los fondos que invierten en deuda de peor calificación crediticia, conocidos como high yield, también llevan tres semanas consecutivas de suscripciones netas. Estos bonos son los que ofrecen una rentabilidad más alta en 2023, del 3,67%, según Bloomberg.